Tras varias semanas desaparecida, Rocío Carrasco ha dado señales de vida apareciendo en un programa matinal de La 1 de Televisión Española. La hija de Rocío Jurado hace apenas treinta días decidió cambiar radicalmente el estilo de vida al que tenía acostumbrada a la opinión pública y unirse a los colaboradores de Lazos de sangre, programa presentado por Boris Izaguirre cuando más álgida está la tormenta familiar.
Rocío Carrasco asegura no querer hablar de su vida íntima con sus amigas
La ex mujer de Antonio David Flores ha dado un paso adelante en dónde parece que la exposición mediática que ha intentado evitar todos estos años ha dado un giro radical, pero este regreso duró muy poco tiempo ya que tras el debate en televisión acerca de la vida de Carmen Sevilla que fue de lo que trató el programa en el que participó hasta ahora, Rociíto no había vuelto a aparecer hasta esta mañana de miércoles 8 de julio en La Mañana de Televisión Española en dónde ha comentado el documental que va a emitir esta noche su programa.
Con un aspecto renovado, tras pasar varias semanas sin contacto alguno con la televisión, Rocío Carrasco se ha atrevido a hablar sobre temas muy difíciles para ella y la colaboradora de Lazos de Sangre explicó el motivo del porqué con amigas muy cercanas a ella no había hablado sobre algunos temas de su situación familiar. Rocío Carrasco ha asegurado que sufre y que es verdad que hay personas qué le dicen que no ha hablado con ella de eso y que es totalmente cierto, ya que se ve obligada a no hablar para no verlas comprometidas con esa situación, debido a que tanto ella como sus amigas sufren y lo pasan mal, que se desahoga con muchas personas en su casa pero que no lo quiere hacer públicamente.
Terelu Campos se ha llegado a meter en líos por tratar de defenderla públicamente
Esos palabras llegaron después de que su amiga Terelu Campos se viera en una encrucijada por tratar de defenderla de las críticas. La colaboradora del programa de Emma García contó que le habían aconsejado en multitud de ocasiones que debía dar un paso al frente y hablar de este tema para zanjar todo lo que se estaba hablando sobre ella.
La hija de María Teresa Campos se había convertido en objeto de todas las personas que no dejaban de criticar a Rocío Carrasco y ella en un intento de solucionar el problema, había llegado hartarse tanto hasta no querer ni oír hablar de él.
Sin embargo, Rocío Carrasco también recordó una anécdota de cuando era adolescente donde participó en un programa de televisión, allí cogió el teléfono y le explicaron que tenía que hacer según qué cosas con el consentimiento de su madre, algo de lo que ya se extrañó mucho puesto que estaba castigada. Al recordarlo no pudo evitar emocionarse.