Altos. Guapos. Ricos. Los mejores en sus carreras profesionales. Parece que todo le sonreía al matrimonio formado por el componente de los Tampa Bay Buccaneers y la modelo brasileña. Pero, el jugador de la NFL ha revelado que no siempre fue así. Su matrimonio estuvo a punto de romperse por culpa de los problemas que arrastraban y la insatisfacción por parte de la modelo.
Tom Brady y Gisele son uno de esos matrimonios que parecen perfectos: él es un deportista de primer nivel considerado un auténtico héroe en su país con contratos millonarios por publicidad y ella es la supermodelo más importante de su generación, imagen de las marcas de moda más prestigiosas y un reclamo para cualquier firma.
La pareja se casó hace más de una década y tienen dos hijos en común, aunque el hijo mayor del jugador es un miembro más
Su boda, hace ya once años, en una romántica y privada ceremonia en un país muy especial para ambos, como es Costa Rica, ponía el broche de oro a una relación que se caracterizó por la discreción desde el primer momento. Pero, en realidad, la historia de amor no sería tan perfecta como la gente cree y el nuevo miembro de los Tampa se ha abierto en una entrevista donde ha confesado todos los problemas por los que ha tenido que pasar la pareja a lo largo de estos años. Incluso, estuvieron a punto de separarse.
Tom Brady es considerado el mejor quarterback de toda la historia de los Estados Unidos
En una entrevista concedida para el espacio de Howard Stern, el histórico exquarterback de uno de los equipos más importantes de los Estados Unidos, los New England Patriots, para muchos amantes del deporte el mejor quarterback de toda la historia, ha confesado que tras la pasada temporada tuvo una conversación muy seria con su mujer y no terminaron de la mejor forma posible. Él quería seguir con sus actividades empresariales y continuar con sus entrenamientos. Su esposa le respondió que cuándo pensaba hacerse cargo de las cosas de la casa o de llevar a los pequeños al colegio. Esa parte era fundamental en su matrimonio y también tenía que hacerse cargo de ella, actividades de las que tenía que responsabilizarme, ya que ella también tiene sus propios sueños y objetivos por cumplir.
Además, el deportista reconoce que su matrimonio estuvo a punto de romperse por la necesidad de cambio por parte de la modelo. Hace unos dos años, Gisele le reconoció que no estaba satisfecha con su relación y necesitaba un cambio. Aunque la situación era perfecta para él, no lo era para ella. Y lo importante es que la relación funcione para ambos miembros. Para que la pareja sea sostenible hay que trabajar ambas partes. Sin duda, una revelación que sorprende por la imagen de perfección que muestra la pareja.