Ana María Aldón, mujer de Jose Ortega Cano y concursante de Supervivientes 2020 ha tenido que ser atendida En Directo por el médico al gritar de dolor mientras realizaba una prueba con los demás concursantes del programa protagonizando uno de los mayores momentos de tensión del programa.
Momentos de tensión en Supervivientes
En conexión Honduras 6 se ha vivido un momento de tensión cuando Ana María Aldón estaba jugando a un juego de recompensa en el qu se premiaba con dormir en la comodidad de un colchón con las sábanas limpias y un desayuno con café con leche y tostadas para la mañana siguiente
El juego consistía en alcanzar unos objetos que estaban puestos alrededor de un circulo que había dibujado en la arena mientras estaban atadas como si fueran titanes.
Ana María Aldón grita de dolor en medio de la prueba de recompensa
Ana María, Ivana y Yiya estaban en plena prueba cuando la mujer de Ortega Cano ha empezado a gritar de dolor por los tirones de las cuerdas, protagonizando uno de los momentos más tensos del programa Supervivientes, tendida en la arena y llorando a plena voz.
Lara Álvarez muy preocupada por su estado al ver la situación, ha pedido que entrara inmediatamente el médico porque no respondía a las preguntas que le hacía la presentadora.
Al final se ha calmado y no ha sufrido ninguna fractura y ha acabado siendo la ganadora de la prueba.
No es la primera vez que asusta a la dirección del programa
No es la primera vez que la mujer de Ortega Cano, protagoniza un susto en el programa, ya que esta última semana cuando salió a pescar al mar los demás Supervivientes escucharon sus gritos desde la orilla y se temieron lo peor ya que no sabe nadar, Hugo Sierra fue rápidamente a socorrerla y Ana María confirmó que se estaba ahogando, afortunadamente todo quedó en un susto.
La mujer de Ortega Cano ni con esas perdió el sentido del humor ya que bromeó diciendo que iba a dejar viudo a Ortega, y además logró que todos pudieran comer con lo que pudo pescar el día que casi se ahoga si no la hubieran oído sus compañeros y hubieran ido a socorrerla.
Pese al susto de hoy, cuando ha gritado tendida en el suelo y necesitado la supervisión médica que por suerte han comprobado que no ha sufrido ningún daño, se ha proclamado ganadora de la prueba por lo que va a ser la afortunada de dormir en un buen colchón con sábanas limpias y por la mañana se tomará un buen desayuno con tostadas y café con leche, la envidia de los demás.