La firma de lencería ha tomado una decisión que, quizás, no sea muy entendible para sus seguidores: su famoso desfile anual, que se graba justamente en el mes de noviembre, ha sido cancelado. La excusa es una necesidad a la hora de evolucionar en el marketing de la compañía.

Sin tiempo para reflexionar, Stuart Burgdoerfer, director del área de finanzas y vicepresidente ejecutivo de la empresa propietaria de la marca, L Brands, ha anunciado que el desfile de lencería del año 2019 ha sido cancelado. Sin duda, un golpe para el mundo de la moda, ya que, el desfile anual de la marca se había convertido en una cita imprescindible para los amantes del espectáculo y uno de los shows más glamurosos.

El ejecutivo defiende su decisión asegurando que la firma necesita evolucionar en el campo del marketing de la susodicha marca

Eso sí, Victoria's Secret seguirá apostando por una comunicación activa con sus clientes empleando una gran cantidad de canales, como pueden ser las redes sociales o los anuncios a través de todas las plataformas, pero el desfile que se emitía justo antes de Navidad y que era el mejor escaparate para la firma – a pesar de que ha recogido críticas y aplausos a partes iguales- ya es historia.

Esta cancelación tiene lugar en un momento en que la firma está teniendo históricas pérdidas al no llegar a las cifras de ventas que se habían calculado por lo que están viéndose obligados a transformar su política de marketing con rapidez.

La firma se ha dado cuenta que tiene que evolucionar si no quiere que la engulla una industria como la de la lencería que es muy cambiante.Además, la aparición de nuevas marcas en el sector ha hecho mucho daño a sus ventas y lo reconocen.

Cualquier modelo que iniciara su carrera profesional quería formar parte del desfile

El famoso desfile de Victoria's Secret se empezó a organizar en el año 1995 y solía contar con algunas de las mejores modelos del momento.

Por allí han pasado desde Naomi Campbell, Heidi Klum, Adriana Lima.. hasta las más jóvenes estrellas de la moda como Kendall Jenner o Gigi Hadid. El sueño de cualquier modelo parecía ser llevar las famosas alas de ángel y lucir la lencería más sexy sobre una pasarela.

El rumor de una posible cancelación ya sonaba hace meses y la primera en alimentarlo fue la modelo de la casa, Shanina Shaik, que ya en el pasado mes de julio aseguraba que había otras formas mejores de desarrollar la popular pasarela y que fuera el show más importante del mundo.

La firma había recibido durísimas críticas, en los últimos tiempos, por el ideal de Mujer que vendía en sus desfiles: blancas, rubias, muy altas, extremadamente delgadas y que parecían todas iguales.