Martín-Blázquez, periodista de “El programa del verano” ha explicado que Irene Rosales se ha visto obligada a llamar a Isabel Pantoja por su preocupación ante el regreso de Kiko Rivera al mundo de la noche, con lo que ello podría significar para el colaborador, que el año pasado salió de la pesadilla de las drogas. La mujer de Kiko estaría muy preocupada por lo que podría pasar con la vuelta del DJ al mundo de la noche. Hay que recordar que Kiko confesó durante su participación en “Gran Hermano Dúo” que acaba de salir del duro mundo de la droga.
Irene habría contactado con Isabel Pantoja para evitar que Kiko caiga en los riesgos de la noche
Irene Rosales está preocupada por su marido, ya que la pareja se ha enfadado hace poco y lo encuentra mucho más irascible y no sería el Kiko Rivera que pudimos ver en la casa de “Gran Hermano Dúo”. Por esa razón, Irene habría decidido hablar con Isabel Pantoja para poder compartir la preocupación por los cambios que podrían surgir en la vida de Kiko Rivera con su vuelta al trabajo en el complicado mundo de la noche.
Según Martín-Blázquez, Kiko ha revelado a su esposa que se siente muy nervioso y con estrés por culpa del lanzamiento de su nueva canción con el que espera poder dar el salto definitivo a Latinoamérica.
Por esa decisión, la pareja habría decidido pasar unos días de tranquilidad, desconexión y relax en Las Palmas, lejos de todo esto.
El joven habría abierto una discoteca en Sevilla, cuyo ambiente no es el más recomendable
Sandra Aladro, también periodista del programa sostiene que este nerviosismo tiene que ver con el nuevo proyecto empresarial que tiene el joven, que sería la apertura de una nueva discoteca en la ciudad de Sevilla.
La discoteca ya estaría en marcha, pero los socios han cambiado. Además, gente del sector han revelado a la periodista que el público y el ambiente de esta discoteca no es el más recomendable para una persona que ha tenido el cantante, por lo que estarían preocupados por el futuro del hijo de Isabel Pantoja.
También han surgido rumores de una ruptura entre la representante y el propio Kiko Rivera.
El cantante, que quiere dar el salto en Latinoamérica y en varios países de Europa, habría decidido romper toda relación laboral con la que era su representante, Blanca. Pero la representante habría hablado con Pepe del Real para desmentir toda esta información.
La vuelta al mundo de la noche no habría sido la mejor opción para la propia Irene Rosales que, además, no puede acompañar a su marido en todos los viajes que pueda tener por delante, ya que se encarga de quedarse con las dos hijas de corta edad de la pareja. Por esa razón, habría decidido hablar con su suegra para poder prevenir las posibles situaciones que podrían surgir en el futuro.