En Sálvame se llevan como el perro y el gato. Kiko Hernández siempre ha sido el malo de la película, siendo uno de los colaboradores que más ha criticado la faceta laboral de la sobrina de Isabel Pantoja... Pero, Anabel ha sorprendido admitiendo hace unos días que, hace unos años , Kiko le daba mucho morbo.
La confesión se inició Sálvame anunciaba el avance de Cazamariposas en el que Nuria Martín se ocupaba de adelantar que pudo existir una “carpeta romántica” entre dos archienemigos: Kiko Hernández y la propia Anabel Pantoja. Según ellos, tenían pruebas de que estuvieron a punto de vivir un romance.
Anabel ha explicado que siente algo por el colaborador, aunque su novio puede estar muy tranquilo
Ante estas informaciones, Kiko Hernández no podía parar de reírse, mientras Anabel intentaba dar su versión sobre lo que se estaba contando en el plató. Actualmente está prometida y con muchas ganas de dar el paso de casarse y su novio puede estar muy tranquilo, pero, si es cierto que siente algo en su interior por su enemigo número uno, Kiko Hernández.
Gema López se tomaba con humor esta revelación por parte de la sobrina de Isabel Pantoja y consideraba que eran los típicos ardores interiores que se pueden sentir cuando eres joven. Anabel ha querido recordar que sus inicios en el programa no han sido fáciles y vivió unos enfrentamientos muy duros con el ex Gran Hermano.
Anabel ha confirmado que se casa el año que viene con su novio canario y le importa muy poco las críticas que recibe
La realidad es que la relación entre ambos siempre ha sido muy complicada e, incluso, Kiko ha querido complicarle su trabajo en más de una ocasión, además de realizar criticas mucho más duras que las realizadas por el resto de los miembros del programa contra el trabajo de Anabel en Sávame.
Anabel tiene un papel muy complicado en el programa: defender a su familia ante las críticas del programa, ser parcial en las disputas entre sus primos Kiko Rivera e Isa y no meterse en líos. Esto ha provocado que, en muchas ocasiones, haya preferido no contestar y utilizar el teléfono móvil para no entrar en el debate.
Anabel se casará el año que viene con su novio, Omar Sánchez, un chico canario que se gana la vida como monitor de surf y como surfista profesional.
Desde que iniciaron su relación, Anabel ha dividido su día a día entre tres ciudades: Sevilla, Canarias y Madrid.
A lo largo de los ocho años que lleva participando en Sálvame, la joven ha pasado por altibajos con sus compañeros, muchos de los malos momentos han sido por intentar defender a su familia o por no tener información sobre la vida personal de su prima Isa o de Kiko Rivera, al que dice que es como un hermano.