La semana pasada en el reality, Supervivientes, Carlos Lozano fue el pirata olvidado en el palafito y ocupó el lugar de Jonathan, el cual fue expulsado del programa. Este se encuentra feliz de haber sido abandonado a su suerte, ya que no debe convivir con ciertos concursantes con los cuales tiene conflictos o no se lleva bien. Pero a pesar que no está con ellos, continua la hostilidad con dos participantes en particular que son Violeta y Dakota.
Esta pelea fue provocada por la condición de pirata olvidado que tiene Lozano, ya que esto le permite robar objetos de sus compañeros y este aprovechó la oportunidad.
Estos sucesos provocaron que los equipos perjudicados se enfadaran, pero la que fue una reacción de mayor relevancia fue la de Violeta quien tuvo una discusión fuerte con Carlos a la que luego se unió Dakota. Dicha discusión fue trasmitida el domingo 26 de mayo. La guerra se activó cuando Lozano les amenazó con robarles un machete, a lo que Violeta trato de impedirlo mostrándose muy enfadada.
Dakota y sus broncas
Luego del problema que tuvo Carlos con Violeta y Dakota, el primero decidió continuar con su tarea de pirata y la decisión de robar una esterilla sobre la cual descansaba Mahi. Esto provocó que Dakota se metiera y discutiera con Carlos.
Después de esto Violeta y Dakota continuaron su ataque contra Carlos Lozano, el cual no se quedó callado haciendo que la discusión subiera mucho de tono y se intercambiaran diversos insultos.
Violeta aprovechó la oportunidad de meterse con el éxito que este tuvo como presentador y animó al resto a hacer sus necesidades y tirar la basura debajo del palafito. Mientras que Dakota se enfocó con él a cuento de su padre, diciendo cosas como: "mi padre te da mil patadas" o "eres un viejo verde". Le recordó lo que dijo su ex ovia de él y muchísimo más.
Lozano y Dakota firman la paz
Poco tiempo después Carlos y Dakota olvidaron su gran pelea y decidieron hacer las paces. Esto ocurrió después que este devolviera algunos objetos que había robado y ambos se disculparan por lo acontecido. El presentador manifestó que reconocía que durante la discusión se habían dicho cosas muy feas.
Que tenía razón de su molestia, porque su tarea como pirata era robar objetos que sus compañeros no estuvieran usando.
Jordi González no dijo quién tenía o no la razón, pero le advirtió a Carlos Lozano que se había saltado la conocida prohibición que tiene el pirata olvidado, ya que no puede hablar directamente con nadie. Este se disculpó, admitió que se equivocó y dijo que no ocurriría nuevamente, ya que no tenía necesidad.