Los reyes Felipe VI y Letizia no están pasando por uno de sus mejores momentos. El duro desplante de la reina Letizia a Doña Sofía a las puertas de la catedral de Palma no ha dejado una buena imagen de la consorte, quien tampoco guarda una buena relación con su suegro, el rey emérito. En general, existe un clima de tensión en la familia que aumenta por momentos, pues hace apenas dos semanas, el rey emérito era acusado en las grabaciones de Corinna y Villarejo de cobrar comisiones del AVE a la Meca o usar a su amiga especial de testaferro, a lo que tenemos que sumarle la entrada en prisión de Urdangarín.

Felipe VI pone en un segundo plano a la reina Letizia por su comportamiento

Los problemas familiares no quedan aquí, pues el rey Felipe VI no sólo ha tomado medidas contra su propio padre, sino también contra la reina Letizia, pues la relación entre ambos atraviesa uno de sus peores momentos, hecho del que también se han hecho eco los principales medios internacionales. Concretamente, el monarca ha decidido alejar a la consorte de la vida institucional y ya no representarán los dos por igual la Monarquía, como los años anteriores han ido haciendo.

El monarca acude a las regatas con su hermana y no con la reina Letizia

Ha sido Felipe VI quien ha tomado la decisión de monopolizar la vida pública de palacio en su persona únicamente teniendo en cuenta los últimos sucesos en torno a la reina Letizia, quien en cada vídeo o fotografía aparece intentando dirigir la situación, la última de las ocasiones ocurría durante el posado en Mallorca, donde la consorte no dudaba en acercarse a sus hijas y recordarles que debían de sonreír.

Con todo, la medida más tajante que ha tomado el monarca ha sido acudir a las regatas con su hermana, la infanta Elena, mientras su esposa, la reina Letizia, ocupará un segundo plano.

Molesto con la sobreprotección a la princesa Leonor y a la infanta Sofía

No obstante, aquí no acaban los problemas entre los monarcas, pues al parecer, Felipe VI no está contento con la actitud que la reina Letizia proyecta a sus hijas, a quienes tiene sobreprotegidas.

El monarca no está conforme con la actitud de la consorte hacia sus hijas, a las que a cada momento está tocándoles el pelo o cogiéndoles la mano con un afán sobreprotector ante los medios de comunicación que deja en evidencia una mala imagen, no sólo familiar sino también institucional para la que será la futura reina de España.