No, ya no valen los argumentos de que: “pobre chica, con la infancia que ha tenido”. Puede que no haya aprendido valores, con esa madre que la trataba como si fuese un trozo de carne que ofrecer al mejor postor, pero eso siendo una mujer adulta ya no es justificación.

Como era la convivencia con su madre lo pudimos comprobar en la edición de GH que ganó y en la que Mayte Galdeano también concursaba aleccionándola, como si fuese una ‘Madame’ y Sofía su pupila, sobre el tipo de contacto sexual que debía mantener con Suso.

Sofía contra todos

Su deriva en Supervivientes comenzó cuando se montó una paranoia de traición viendo que Logan no remataba el roneo con ella, luego llegó a la isla Alejandro Albalá a montar el paripé de dejarla en directo y partir de ese momento no ha parado de repartir a diestro y siniestro.

Ella dice que es sincera, pero todo forma parte de su estrategia para intentar ganar, estrategia que la ha metido en una espiral de violencia verbal que ni la organización de Supervivientes, ni los diferentes presentadores o no han sido capaces o no han querido siquiera parar.

El enviar a Hugo a Honduras ha sido todo un golpe de efecto, pero ha sacado a la luz los peores demonios de la navarra que ha humillado, vejado y vilipendiado a su ex pareja en lo que viene siendo un claro caso de maltrato psicológico. Cierto es que parece que a Hugo le va la marcha, ya que poco o nada ha hecho por acabar con el acoso e incluso a ratos se le ha visto distendido con su verdugo.

Sofía ha perdido el concurso

Lo perdió en la pasada gala cuando se lanzó a la yugular de María Jesús que se había atrevido a llamarla fea por dentro y por fuera, algo fácilmente comprobable tanto afirmativa como negativamente, por lo que su rebote y su mala baba no eran necesarios.

Pero ella es como un pit bull y cuando muerde no deja su presa.

Eso hizo con María Jesús a quien también criticó su físico y no contenta con eso, se metió con las parejas que había tenido con muy mal estilo: "Qué asco, qué asco su currículum, que es conocida por acostarse con un señor que cuando le ves dices ¡Oh my God!". Y como colofón y lo más grave: "El día de mañana sus hijas estarán avergonzadas de ver a su madre aquí".

Las redes sociales no han dejado desde ese momento de pedir su nominación disciplinaria e incluso su expulsión, pero Telecinco parece estar enrocado en mantenerla en el Reality contra viento y marea sin ni siquiera amonestarla.

Pese a todo, saben que no puede ser la ganadora como hicieron con Belén Esteban, un caso muy parecido y a partir del cual la palabra "tongo" ha sobrevolado en todos los realities. Telecinco, esta vez, no se lo puede permitir. Entonces ¿Por qué no la sancionan?