Lo que se vivió ayer en el programa de “AR” fue algo tan despreciable que lo que no se puede entender es que ni las mujeres presentes abandonasen el plató, ni que Ana Rosa Quintana no lo invitase a salir del mismo y durante unos interminables minutos este hombre vomitase su bilis y su machismo sin que se le parasen los pies.

Cuando en todo el mundo se han llevado las manos a la cabeza por la incomprensible sentencia que absuelve a unos cretinos desalmados de un delito de violación en grupo y los confina solamente a nueve años de prisión, que no serán más de cinco y como ya llevan dos en prisión preventiva, se quedarán probablemente en tres; llegó Arcadi y en su necesidad enfermiza d’épater les bourgeois, soltó una perorata del peor estilo.

Arcadi vomita su bilis y nadie le para los pies

Exgrimir argumentos tan peregrinos como que se debería examinar la vida sexual de las víctimas de violación es hasta denunciable. Las periodistas que se sentaban junto a este hombre tan pagado de sí mismo que incluso considera que puede asomarse a nuestras casas con un nido de gaviotas en la cabeza, no atinaban por lo visto a decir nada más allá de: “No digas eso, Arcadi” o “No, eso no” comentarios de una tibieza alucinante y en ellos incluimos a la jefa Ana Rosa Quintana.

Según Arcadi se ha hecho un juicio paralelo y a nadie le debe importar la vida sexual de los miembros de La Manada, esos pobres chicos que a pesar de haber mantenido sexo no consentido con su víctima, no la violaron, por eso Espada los defiende con vehemencia.

¿No se puede informar sobre las víctimas porque son víctimas?” al ser reprendido por las mujeres presentes, con tibieza, eso sí; Arcadi seguía en sus trece con ese aire de prepotencia que es su marca de fábrica argumentando siempre a favor de ‘La manada’ y de que él como hombre también puede ser violado. El hashtag #MasManadaAR fue rápidamente Trending Topic.

Para el periodista, el juez que votó a favor de la absolución de los acusados es un héroe: “Admirable el particular voto que este nuevo héroe civil, el juez Ricardo González” dicho con ese rictus de superioridad que le caracteriza, considerando que su exposición y razonamiento fue: “Una prosa con el tacto inexorable del proctólogo que explica una enfermedad".

Curioso que hablando de violación le venga a la cabeza la imagen de este especialista médico ¿No?

El amigo de Albert Rivera, Salvador Sostres y Carlos Herrera siguió por el mismo camino, sin que se tomasen medidas contundentes para acallar su verborrea. Os dejo unos de los comentarios más ‘políticamente correctos’ de los miles que han inundado Twitte