La reina Emerita doña Sofia hace tiempo contaba con una agenda muy importante, ya que se trataba de la esposa del rey Juan Carlos I a lo que se le sumaba su labor con la Fundación Reina Sofía. Cuando Juan Carlos I abdica, el papel de Doña Sofía, quedó relegado a un segundo plano, no le queda más remedio que aceptar la nueva situación que se le presentaba en su vida.

El papel de la monarquía para ella cambió totalmente, pasó de ser la consorte del Rey Juan Carlos, que era tenida en cuenta admirada y respetada por todo el mundo, a ser la sombra de los actuales reyes de España.

En esta nueva monarquía había muy poco sitio para doña Sofía. Aparte de todo esto, la actual reina consorte española, Letizia Ortiz, luchó porque la familia real estuviese encarnada por los reyes, su hija la princesa Leonor y la infanta Sofía, pero por el momento ni la Princesa de Asturias ni su hermana Sofía representa ni lo más mínimo a la Corona por lo cual el peso principal de la institución cae sobre los hombros de don Felipe y su mujer Leticia.

El Rey emérito Don Juan Carlos sigue ocupándose de ciertos compromisos, pero la verdad es que lleva una vida mucho más tranquila desde su abdicación y en general está encantado con esta nueva vida, por mucho que se hable de que la abdicación fuera obligada debido a las circunstancias.

Por otro lado, la Reina Sofía se siente feliz de que su hijo reine pero al mismo tiempo considera y ha hecho público que podría hacer muchas más cosas de las que verdadera y actualmente hace.

Doña Sofía: "No me dejan salir mucho"

Según fuentes del portal de noticias de prensa rosa Bekia, la Reina Sofía ha hecho su confesión más sincera y es que afirma que en la Casa Real no se la deja participar apenas en demasiados asuntos y que tampoco se le permite desempeñar nuevas tareas, algo que ha tenido que llevar con muchísima resignación, aunque le duele ya que es su familia.

La Reina Sofía asegura que no la dejan salir mucho y que tiene temporadas de bastante actividad, pero que, sin embargo, hay muchas otras en las que apenas puede tomar compromisos que tengan que ver con la corona.

Viéndose en esta situación, está disgustada tanto con su hijo como con Doña Letizia, con la cual mantuvo un tenso rifirrafe hace varias semanas, que estuvo ocupando portadas de medios de comunicación durante bastantes días. La reina Emérita no duda en aceptar proyectos de la Fundación Reina Sofía dónde tiene más margen para hacer y deshacer y se puede dedicar a las causas sociales que le gustan.