La reina letizia está viviendo uno de sus sus peores momentos desde que llegó al trono y ocupó la primera línea de la institución monárquica española. Pese a que las polémicas siempre han invadido la vida de la consorte, quien en numerosas ocasiones ha demostrado su fuerte carácter, lo cierto es que la escena vivida el pasado domingo de resurreción a las puertas de la catedral de Palma acapararon todos los flashes y no han tardado en generar debate. Las primeras consecuencias, no sólo por parte de la Familia Real, sino también del pueblo español se han podido presenciar en el día de hoy.

Ocurría esta misma mañana, cuando la reina Letizia acudía a un acto sobre el tratamiento informativo de la discapacidad en las redes sociales, el primer acto tras el tenso rifirrafe con Doña Sofía y esto ha sido lo que ha encontrado la consorte.

La reina Letizia, abucheada e insultada a su salida del primer acto tras el rifirrafe

A su llegada, la reina consorte ha sido preguntada por multitud de medios de comunicación agolpados si "estaba bien" y si "estaba preocupada", refiriéndose concretamente al vídeo que ha circulado a través de Internet y en el que se la aprecia malhumorada. Pese a las preguntas, ésta no ha respondido en ningún momento. No obstante, a la salida del acto, un grupo de personas se agolparon a las puertas de la sede de la Organización Médica Colegial, donde se estaba celebrando el acto y a la salida, se han escuchado gritos, pitidos y abucheos del grupo.

Calificada de "maleducada" por parte de los ciudadanos

Concretamente, ha sido una joven la que gritaba a la consorte "fuera, antipática, floja". Más tarde, la ciudadana se ha dirigido a la prensa que se agolpaba cerca declarando que le hubiese gustado que Letizia diera "las gracias a todos los españoles por dar de comer a toda su familia".

Más tarde, la ha calificado de "maleducada" por el feo gesto que tuvo con su suegra, Doña Sofía delante de todas las cámaras.

Pese a la gravedad de los hechos, que están circulando por los informativos de todo el mundo, la Casa Real ha optado por no pronunciarse al respecto, no obstante, son muchos los que han pedido a través de las redes sociales unas disculpas de la consorte, no sólo hacia su suegra, sino también a los ciudadanos, quienes pagan anualmente un sueldo que supera los 120.000 euros para presenciar numeritos dignos de "Gran Hermano" y no aprecian una representación digna en esas imágenes.