Alfonso Ussía vuelve al punto de mira apenas un mes después de criticar duramente al director de Salvados, Jordi Évole, tras su programa sobre la industria cárnica en una granja de Murcia que perjudicaba gravemente la imagen de la marca 'ElPozo' por las desagradables imágenes sobre los cerdos que se podían apreciar en el reportaje. Ussía, lejos de dar La razón a Évole, reprochó su presencia en una granja de Murcia en lugar de acudir a una catalana y lo tildaba de "manipulador de los intereses políticos y de no hacer periodismo de investigación".
Pese a que el escritor se despachaba a gusto con el director de Salvados, ahora ha vuelto a la carga contra la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau.
Los duros insultos de Alfonso Ussía contra la alcaldesa de Barcelona
Ha sido concretamente a través de un artículo para el medio La Razón, donde el periodista calificaba a la alcaldesa de Barcelona de "cañería de mediocridades" y "saco de rencor pestilente". El escritor ha centrado su crítica hacia Colau en la retirada de un monumento al primer marqués de Comillas y la próxima retirada del Almirante Cervera cambiándola por el de Pepe Rubiales al que, según Ussía, lo único que se le reconoce intelectualmente es esta frase: "La unidad de España me suda la polla.
Que se metan España por el puto culo a ver si les explota dentro".
Las críticas del periodista a Manuela Carmena
El periodista, visiblemente enfadado, argumenta que la decisión de Colau es un insulto a la Historia y califica a la alcaldesa y a su grupo de "asnal manada podemita" llegando a afirmar que Ada pasará al sótano de las pesadillas mientras que el Almirante Cervera será recordado siempre.
No obstante, el escritor Alfonso Ussía también critica duramente a la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, a quien llega a calificar de "podemita comunista" por sus medias en el Ayuntamiento de Madrid.
Las razones del cambio de nombre en el callejero de Barcelona, la Ley de Memoria Histórica
Con todo, el articulista de 'La Razón' explicaba abiertamente quién era el Almirante Cervera, y argumentaba que fue quien enseñó a nadar a Franco, por lo que suprimir su nombre del callejero de Barcelona es una aplicación de la Ley de la Memoria Histórica.
Finalmente, Ussía pone punto y final a su artículo lamentándose de la ciudad en la que se está convirtiendo Barcelona y la califica de "cañería de mediocridades" debido a la labor de los dirigentes del "Excrementísimo Ayuntamiento".