Más allá del porcentaje de razón que pueda tener o no, si algo ya saben cuando se enfrentan a Belén Esteban es que, si se nombra o se desliza el nombre o la figura de su hija en un plató de televisión, esta "ma-ta".
Y es precisamente lo que sigue dispuesta a hacer después de que su pequeña esté protagonizando distintas publicaciones a raíz de la polémica que se ha desatado en relación al posible doble rasero de la prensa en general y de Sálvame en concreto en el trato de la llegada a la mayoría de edad tanto de Andreíta como de Alejandra Rubio, hija de Terelu Campos.
Otro encontronazo más
Un tema que provocaba un encontronazo entre ambas que llegaba, incluso, a alcanzar a la dirección del programa, con quien la conocida como princesa del pueblo se llegaba a encarar después de que Alberto, director de la última emisión, le preguntase a través de Carlota Corredera si a ella le gustaría que se filtrase el contenido de una conversación privada suya con él.
Algo que sacaba de sus casillas a esta que no dudaba en encararse con el director del programa indicando que se le veía el plumero a la hora de tratar las dos mayorías de edad: "mi hija abrió programas quince días ¿la gente por qué hace exclusivas? Por dinero, que me parece muy bien, yo lo he hecho, pero que no diga que quiere presentarla, ¿estamos tontos?”.
Tras deslizar que esas llamadas entre Terelu y la dirección pidiendo respeto a su hija se habían producido y que de ahí esa diferencia de minutos y tratamiento a sus dos hijas, a la mayor de las Campos no le quedaba más remedio que tomar el teléfono e intervenir desde Málaga, donde se encuentra disfrutando de la Semana Santa, para desmontar las mentiras que estaban saliendo de la boda de la de San Blas.
Terelu se cansa de las mentiras de la Esteban y la calla de cuajo
Después de asegurar que ella hablaba con el director para tratar muchos temas, aseguró que en ningún momento salió el tema de cómo cuánto hablar de Alejandra. Era entonces cuando se dirigía directamente a Belén con un tono muy serio indicando que "yo no prohíbo ni censuro nada”.
Antes de retirarse a seguir disfrutando de Ale, su familia y las procesiones malagueñas que se están celebrando estos días en la capital de la Costa del Sol, Terelu, que aseguraba que esas supuestas conversaciones a las que se refería Belén no existían y eran inventadas, le dejaba claro por qué había decidido hacer una exclusiva con su hija diez días antes de que cumpliera los dieciocho años: "Por dinero y porque era inevitable que saliera". Callando a Belén de cuajo.