No existe otro programa como Sálvame. Este muestra de todo un poco, no creo que exista alguna persona en el país que no lo vea. Presta entretenimiento al público y demuestra la versatilidad de sus colaboradores.
Ellos dan lo mejor de sí en cada emisión del mismo. Es indudable lo que hacen, más no hay que quitarle su cuota de participación a la dirección del programa. Estos cumplen uno de los papeles más importantes en el desarrollo del programa, por lo que es un trabajo en conjunto.
Entre tantos conflictos presentados a diario hay que liberar la tensión en el plato de alguna manera, de manera que los colaboradores aparte de cumplir con su rol se diviertan un poco y sin querer agreguen un toque de comicidad al plato.
Por lo que Rafa Mora y Chelo García Cortés deciden presentar una escena algo diferente en esta oportunidad. Claro como siempre bajo la dirección de Carlota Corredera, quien se encarga de dirigir el programa para ese momento.
Sensaciones a flor de piel
Tomando como tema una escena de la película Titanic, Carlota Corredera invita a Rafa Mora Y a Chelo García Cortes al centro del plato. Para que colaboren con la personificación de los personajes Rose y Jack. Al escuchar la propuesta Chelo comunico que lo haría porque era una profesional.
Sin poner objeción Rafa se levantó de su asiento muy dispuesto a realizar la actuación. Es increíble que hasta una peluca le colocaron a Chelo García Cortés para que se sintiese más acorde con el papel.
Luego subieron al plato y comenzaron su escena, pero se les exigió algo de dialogo.
Puesto que previo a eso se les mostró la escena que harían. Pero Chelo dijo que no se sentía inspirada para actuar, los compañeros de plato le dijeron sus líneas y posterior a esto tanto Chelo como Rafa las dijeron. Nuevamente se escuchó la música y la audiencia pidió un beso entre los colaboradores.
Por lo que Rafa Mora le tomo el rostro a Chelo y la beso, pero esta se quejó diciendo que cuando se han dado besos en el plato han sido de verdad y que no ha habido ningún hombre que le pusiera la mano en la boca. Por sus palabras exigía que Rafa la besara en serio.
Así que la colaboradora se acerca a Mora diciendo que si quiere un beso que aprenda a besar y le planta un beso directo en la boca.
Vemos que la colaboradora es de armas tomar, tomo la sartén por el mango y al verse ofendida por la acción de Mora le dio una lección que no creo que este colaborador olvide. Pues la expresión de su rostro era todo un poema.