El programa matutino de Federico Jiménez Losantos, en Es Radio, es una buena excusa para estar informado de las noticias del día. Pero también para estar al tanto de todos los motes que pone a los políticos españoles y que incluso llegan a algún periodista relevante de los medios de comunicación. No tienen desperdicio y desde luego que no dejan indiferentes a nadie. Ni a sus seguidores ni a sus detractores.
Desde luego que uno de los apodos más impactantes es el que dedica a dos de las mujeres con mayor poder en el gobierno de Mariano Rajoy, como son Soraya Saénz de Santamaría y María Dolores de Cospedales. Son aludidas en sus comentarios por la radio como “las niñas asesinas”. Esta denominación se sustenta en la enorme rivalidad que tienen las dos políticas del Partido Popular que se tienen un odio infinito. Tampoco el presidente del ejecutivo se libra de los motes de Jiménez Losantos. Aunque en este caso es mucho más previsible ya que juega con su apellido, llamándole “Rajao” en vez de Rajoy.
Apodos para Echenique, Escolar…
Pero el mayor estrambote es del que ha sido víctima uno de los principales líderes de Podemos como es Pablo Echenique. Pues debido a que este político popularizó una conocida y tradicional canción erótica de la España más casposa ha pasado a ser conocido en el programa de Federico Jiménez Losantos como “Echeminga”. Los motivos son obvios como pueden constatar los lectores más perspicaces.
Otro de los apodos que mayor atención despiertan entre los radioyentes es el dedicado al director del digital El Diario. También juega con sus apellidos y en vez de llamarle Escolar incide todas las mañanas en “Preescolar”. Aludiendo a la poca cultura que tiene este periodista y de la que se jacta todos los días en su programa de radio.
Ni Juan Carlos I se libra de los motes
La lista se completa con otra serie de disparatados y surrealistas motes de toda clase y naturaleza. De la no se libra ni el mismísimo rey emérito Juan Carlos I al que se refiere siempre como “el Campechano”. Con motivos obvios y en este caso más entendibles por la audiencia. Fuera de nuestras fronteras también están presentes los exabruptos por parte de unos de los locutores más mediáticos de la radio fusión española. Generalmente a mandatarios que no son de su cuerda política.
Uno de los ejemplos más relevantes es cuando se refiere al anterior presidente de Venezuela, Hugo Chávez. Siempre habla de él como “el gorila rojo”. Se entiende muy bien lo del color, pero la alusión a esta clase de simios no es del todo captada por sus seguidores. Hasta el momento, uno de los pocos que se ha librado de sus apodos es Felipe VI.