Dicen que en televisión uno goza del cariño y del respeto de todo el mundo, hasta de quienes no te tragan, mientras dura el periplo que te mantiene en lo más alto. Sin embargo, en sentido inverso, que cuando la audiencia empieza a cansarse de ti serán los que más te adulaban quienes te apestarán con más violencia.
A falta de saber a lo largo de este 2018 si Carlota Corredera es oficialmente la estrella más fugaz de la historia de Mediaset España, lo cierto es que nadie puede dudar que en el primer trimestre de este nuevo año la gallega a ha ido perdiendo protagonismo a un ritmo endiablado que ni en los peores presagios podía llegar a imaginar.
Con cada vez menos apariciones en Sálvame la peor de las noticias se confirmaba cuando el mandamás del grupo audiovisual italiano en España, Paolo Vasile, le confirmaba que el programa desaparecerá definitivamente en las próximas fechas después de que este no haya levantado cabeza desde la salida de Marta Torné de las labores de conducción.
Era entonces cuando todos los ojos se posaban sobre una Carlota que cerraba el pasado año vendiendo en varias revistas la máxima felicidad que le suponía el salto que había pegado a nivel profesional y que ahora parece la nueva apestada de Telecinco.
Y es que, tal y como les adelantamos aquí la pasada semana, Cámbiame será historia a lo largo de los próximos días para ceder su espacio a Christian Gálvez, presentador de Pasapalabra y sustituto de Carlota Corredera en esta franja horaria en la que, a partir de ahora, se emitirá el programa de preguntas y respuestas, eso sí, en formato familiar.
Todo un cambio radical que está destinado a recuperar la audiencia perdida y que señala, y de qué manera, a la que muchos han empezado ya a calificar como "la muñeca rota" de Telecinco.
Algo que solo se podrá confirmar o desmentir si en los próximos meses se le asigna o no un nuevo proyecto con ella al frente y, en caso afirmativo, la audiencia la respalda o la condena quién sabe hasta cuando.
Carlota Corredera, al borde de abismo
Sea como fuere, lo cierto es que, de momento, Carlota Corredera va a desaparecer de la televisión como primera espada para situarse en la sombra durante un tiempo.
Mientras esta ha perdido Cámbiame y el oficioso cargo de sustituta primera de Jorge Javier Vázquez en Sálvame, otros como Gálvez, silenciosos, doblan su presencia en antena. Parece que corren malos tiempos para la "niña mimada" de La Fábrica de la tele.