Hay personas poco acostumbradas a recibir "zascas" en los medios de comunicación y luego está Kiko Matamoros, quien por su carácter, sus contactos, su poder o por lo que sea es de los que se atreve a plantar cara a quien se le pongan por delante, incluso aunque estas sean María Patiño y Belén Esteban, tal y como demostró en su vuelta al ruedo del Deluxe, despellejándolas sin piedad.
Lo que el empresario no esperaba ni por asomo era que su discurso, tan vehementemente contado y con la seguridad con los que fue pronunciado, iba a ser desmontado apenas unas horas después de que toda España le creyera a pies juntillas por otro "gallo" del mundo de la crónica social como es el periodista José Manuel "Pipi" Estrada.
Este, que conoce a la perfección los entresijos de la profesión, incluyendo televisiones, productoras y personajes de las altas esferas de lo audiovisual patrio, no dudó en poner en su sitio a Kiko Matamoros tras su paso por el Deluxe desmantelando, una a una, todas las mentiras que este habría revelado en relación a su "no fichaje" por Supervivientes 2018.
Desmontaje que Pipi realizaba a través de las redes sociales asegurando que la razón esgrimida por este, es decir, la de que aunque le ofrecían ser el mejor pagado no iba a ir porque no llegaban al caché que considera está a la altura de su personaje, era rotundamente falso. Así lo habría podido confirmar.
Según Estrada, lo que de verdad ha pasado es, por un lado, que Bulldog, la productora de SV 2018, "está tiesa" desde que "Angelo Rocca" se encuentra detrás de esta.
Lo que por un lado explicaría que no llegasen a sus peticiones... ni a las de otros muchos dado que, sencillamente, no disponen del dinero en caja que cabía esperar.
Por otro, que lo que de verdad habría llevado a romper las negociaciones entre ambos es el hecho de que Matamoros hubiera tratado de imponer la presencia de su esposa, Makoke, como pareja suya durante el concurso, a quien no querrían ver desde Bulldog siendo solo él quien interesa públicamente.
La verdad de Kiko Matamoros
Tras llamarle "mentiroso" y "pichón", el comunicador aseguraba que lo que de verdad le dolía a Kiko es que lo que a este le hubieran ofrecido distara muchísimo de lo que en su día le pusieron encima de la mesa al periodista deportivo. Es decir, 150.000 euros, 30.000 euros a la semana, lo que ya nadie parece podrá cobrar de ahora en adelante en este espacio. La crisis se lo ha llevado todo. Incluso la participación de Kiko Matamoros en Supervivientes.