Como dice el dicho español, "donde las dan las toman", y sobre todo cuando la persona que recibe un ataque, por nimio que este sea, decide guardarse su venganza para cuando en frío, cuando nadie espere su golpe, lanzar un gancho de derechas que te mande a la lona o, como mínimo, te deje traspuesto.

Esa bien podría haber sido la táctica escogida por María José Campanario, mujer de Jesulín de Ubrique, de quien en las últimas horas decíamos que tenía previsto retomar su vida al completo compaginando sus visitas a la clínica con el inicio de un nuevo Máster con el que seguir formándose en el mundo de la medicina.

Pero poco ha durado la tranquila buena nueva de la enemiga número uno de Belén Esteban. Y es que a las pocas horas de que lo anterior se hiciera público, varios medios de comunicación han empezado a recoger una conversación perpetrada por la castellonense en las redes sociales con su hermano en la que se quedaba bien a gusto contra quien considera una de sus mayores hostigadoras, como es el caso de María Patiño.

Periodista, la gallega, a quien la odontóloga tiene enfilada desde que en su momento deslizase una supuesta crisis de matrimonio entre ambos y que se agravara durante los días en los que María José estuviera ingresada este verano en una clínica por problemas derivados de su fibromialgia.

Aquello, es decir, el tratamiento de aquella situación, habría sido la gota que habría colmado el vaso.

Tanto es así que, más allá de las comidillas en privado que se intuye han venido haciéndose sobre la vida personal y profesional de "la Pati", como le llaman sus más allegados, se han trasladado también al lado público como bien revelan en sus informaciones nuestros compañeros de EsDiario.

Así quedaba reflejado en una conversación en las redes en las que algunas de las admiradoras de la Campanario le preguntaban por su truco para estar tan guapa después de haber pasado por momentos tan duros como los que sufría este verano y de los que, al menos a la vista, parecen más que superados.

Se avecina una guerra total entre Patiño y Campanario

Pregunta a la que esta respondía con sorna que gracias "al vino", provocando que su hermano, que estaba leyendo aquella conversación informal en Facebook, encendiera el mechero con un comentario que a buen seguro encontrará respuesta en la comunicadora. Este decía que si ese era su secreto "alguna que sale en Socialité se cayó en la marmita de pequeña...y sigue siendo muy pequeña”.

Lejos de huir de la polémica, "la Campa" respondía mofándose y soltando una larguísima risa para deslizar, deliberadamente, que su enemiga tendría ciertos problemitas con la bebida. Así lo hacía: "Menos mal que no bebo, si no estaba ya por los suelos. Que digo yo... a mí nunca me han cogido ‘cocida’ en la feria de Sevilla”. Se viene guerra.