No desvelamos nada nuevo si revelamos que Belén Esteban es, probablemente, la colaboradora de Sálvame más cercana a la dirección del programa, a la producción y una de las "niñas mimadas" de la cadena de Fuencarral.
Una situación que a buen seguro le ha reportado muchas alegrías a lo largo de su trayectoria como tertuliana, colaboradora y copresentadora de espacios en Telecinco, pero que también le ha supuesto muchos quebraderos de cabeza cuando esta se ha sentido en medio en alguno de los muchos líos que ha habido entre tertulianos, entre estos y los presentadores, o entre colaboradores o conductores y la producción o la dirección de Sálvame.
Un contexto que se volvía a producir en las últimas semanas cuando, a raíz de la publicación de un medio sobre la inminente oleada de despidos que se pueden producir en Sálvame y el Deluxe con la intención de renovar la cara a un formato que podría estar dando síntomas de agotamiento deshaciéndose de aquellos que menos estarían aportando a nivel informativo en este espacio.
Era entonces cuando saltaban los dos primeros nombres de Lydia Lozano y Terelu Campos a los que, poco después, se les sumaban los de Rafa Mora y Jesús Manuel. Un tema que, de nuevo, volvía a salir en una de las últimas emisiones de este espacio requiriendo que algunos de los tertulianos se mojasen ante esta inminente cascada de despidos.
Una vez más, la denominada como Princesa del pueblo, se colocaba al lado de sus jefes deslizando que está de acuerdo en que algunos de los que menos juego vienen dando durante los últimos tiempos en estos programas salgan, al menos durante un tiempo, de delante de las cámaras.
Concretamente aludía a una de las nominadas a salir por la puerta de atrás de estos programas como es Lydia Lozano de quien aseguraba quizás "necesita un descanso", para posteriormente agregar que, aunque ahora la veía "muy entregada", hasta que salió su nombre como nominada "no la veía tanto".
Belén señala a Lydia Lozano
Tal y como le ha sucedido a ella en muchas ocasiones, según sus propias palabras, ahora le estaba pasando a otros colaboradores -dirigiéndose a Lozano- que ya sea "por cansancio, por agotamiento o por cuestiones personales" no están rindiendo conforme se espera de ellos.
Una sentencia que coincide, coma por coma, con la que se esgrimía estaría detrás de los próximos despidos que se producirían en el programa. Si algunos en la cúpula esperaban el respaldo de algún pesado pesado, ya lo tienen.