Si algo no pueda faltar en una edición del reality decano de la televisión, Gran Hermano, es un concursante procedente de las islas Canarias. Fruto de ello, una de las paradas obligatorias del casting del equipo de Endemol España y Telecinco enviado para realizar la selección de candidatos es alguna de las capitales de las islas afortunadas.

Longeva candidata a Gran Hermano Revolution

Ha sido precisamente allí donde hemos tenido la oportunidad de conocer a la que es, de largo, la candidata a entrar en la casa de Gran Hermano 18 más longeva de todos y que, de entrar, se convertiría en la gran hermana más mayor de todos los Big Brother emitidos a lo largo y ancho del planeta. Y no será por ediciones internacionales.

Hablamos de Catalina, una "canariona" de 88 años que no ha dudado ni un solo momento en apuntarse al casting que estaba previsto recientemente en Las Palmas de Gran Canaria como una más, después de haberse registrado telefónicamente y apuntado debidamente el día y la hora a la que la caravana de Gran Hermano Revolution iba a parar cerca suyo.

Allí, en la cola, no tardó en llamar la atención de todos los presentes siendo rápidamente captada por las cámaras de la organización que no dudaron en hacerle un vídeo en el que explicaba las motivaciones que le habían llevado a meterse en semejante jaleo a una edad en la que la mayoría de los mortales prefieren la tranquilidad. Según Catalina, "quería estar con la juventud", además de estar deseando vivir una experiencia que, a través del otro lado de la pantalla, lleva siguiendo en todas y cada una de las ediciones que se han venido emitiendo desde Telecinco hasta entonces. Ahora, cuando GH va a cumplir la mayoría de edad, por qué no intentarlo.

Y es que Catalina sabe que la presente edición va a ser muy distinta a todas las anteriores y que tanto la dirección del formato de tele realidad como la cadena quieren hacer una verdadera revolución que, por qué no, se inicie metiendo en la casa a una señora que está rozando el convertirse en nonagenaria.

Catalina, la abuela de Gran Hermano Revolution

Si la salud le acompaña, como parece al verla y escucharla, no hay duda de que su capacidad de integración con los más jóvenes está fuera de toda duda, habiéndose hecho fotos y hablado con decenas de candidatos matando así las horas de espera en la cola que, lejos de lo que pudiera parecer, no la han cansado apenas.

Con su nieta apoyándola y el resto de la familia sin enterarse de que quizás esté en Guadalix de la Sierra, desde aquí animamos a la organización a darle una oportunidad. Sería tremendo.