Jorge Javier Vázquez de nuevo ha desatado el escándalo, a raíz de ese estilo irónico y agudo con el que siempre le hemos visto en televisión. Y es que ya se sabe que lo que haga o diga en cualquiera de sus programas, simplemente no puede pasar desapercibido. Y si decidía ponerse un traje de fallera, con más razón.
Esa, es justamente la cuestión por la que el Ayuntamiento de Valencia y otras facciones, se han sentido tan profundamente indignadas con la más reciente emisión de "Sálvame", donde el tema de conversación era la popular celebración de las fallas.
La idea original era que una de las compañeras del showman se vistiera con el traje típico de la fiesta, pero ante la negativa de la colaboradora en cuestión, JJ hizo a un lado la vergüenza y decidió enfundarse él mismo en el vestido, pretendiendo darle un toque cómico a la transmisión del día.
Así salió a pasear por todos los sets de Telecinco, micrófono en mano y una actitud increíble que no daba lugar a burlas, (al menos no que le afectaran a él).
Lo que sí ocasionó, además de risas, fue la indignación de varias personas, tanto dentro como fuera de las instalaciones televisivas. Algunos espectadores se tomaron la broma con mucho sentido del humor. Otros, expresaron su descontento; ya no solo por el desparpajo del comunicador ante la pantalla, sino porque hasta el traje de fallera era inexacto respecto al que se usaba de verdad en los festejos valencianos.
"Hizo sentir mal a los valencianos, usando una indumentaria muy diferente de la que es costumbre llevar a las fallas", alegó alguien en la audiencia, dando origen a otro escándalo televisivo en las redes sociales.
Tan pronto como este capítulo de "Sálvame" hubo concluido, los concejales valencianos pusieron manos a la obra en conjunto con la Junta Central Fallera para ver que podían hacer al respecto.
Ahora, por parte del Partido Popular han llegado exigencias para que el presentador rectifique públicamente sobre lo que consideran, una representación de extremo mal gusto hacia las costumbres de la región.
Por el otro lado, llegan las réplicas de quienes consideran que si bien la actuación de Vázquez pudo ser ofensiva para cierto sector de la comunidad, no pasa de ser un acto humorístico y sin intenciones de hacer verdadero daño. Por no mencionar que ninguna de las instituciones mencionadas, cuenta con autoridad para decidir sobre los contenidos que emite Telecinco.