El director de La Razón, y tertuliano fijo en los platós de televisión, Francisco Marhuenda, tiene motivos para preocuparse aún más. Desde hace unas semanas, casi no hay día en el que se despierte con una preocupación nueva, y todas tienen que ver con su vinculación con la operación Lezo y los contactos (o connivencia) de su periódico con el Partido Polupar de Madrid, y más en concreto con el Canal de Isabel II comandado por aquel entonces por el hoy encarcelado, Ignacio González.

Si hace una semanas, las grabaciones del sumario de Lezo lo colocaban, a él y su medio, como posibles coaccionadores de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, (causa finalmente archivada); ahora las nuevas grabaciones filtradas y publicadas por El Español, parecen refrendar la sospecha de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil, que sospecha que Ignacio Gonzalez financiaba de manera irregular, y con dinero público del Canal, el periódico presidido por Mauricio Casals y dirigido por Marhuenda.

En las escuchas registradas por la guardia civil, se oye a Edmundo Rodríguez Sobrino, consejero delegado del periódico, y a Santiago Barreno, presidente del Consejo de Administración del mismo, preocupados por una deuda que les ha dejado pendiente el Canal de Isabel II, que asciende a la cantidad de 650.000 euros. Lo curioso de la conversación, es que en ningún momento muestran el más mínimo interés por reclamar legalmente tal deuda. Cosa que sería lo habitual en el caso de tratarse de una adjudicación legal, correspondiente a contrato público. Al contrario, ambos interlocutores consideran improbable recuperar ese dinero porque, "El concurso que habían lanzado entre agencias para adjudicar publicidad se lo han impugnado, y el concurso ahora está paralizado".

En otro momento de la grabación se oye a Santiago Barreno comentar a su interlocutor, que el presidente del periódico, Mauricio Casals, está "pistola en mano, en sentido figurado, ¿creo?, buscando dinero para compensar porque si no nos hacen agujero". Dando a entender que Casals estaría buscando financiación por otros Medios para cubrir la ausencia de pagos pendientes del Canal.

Cada vez se cierra más el círculo entre el periódico y los tejemanejes de dinero público del Canal de Isabel II llevado a cabo por Ignacio González y los suyos. Y no resulta complicado deducir de las informaciones conocidas que el medio de Francisco Marhuenda recibía financiación irregular del mismo Canal. Lo que justificaría el disgusto de la cúpula del medio cuando Cifuentes puso en conocimiento de la justicia estas acciones; y que podrían ser el desencadenante de las coacciones y campaña de desprestigio que el medio pudo llevar a cabo contra ella.