Según las declaraciones del italiano afincado en España, su relación con Oriana Marzoli se deterioró hacia el final del programa y la que fuera una de las parejas más queridas y polémicas del Reality se disolvió nada más abandonar el reality.

Las últimas jornadas para la pareja fueron bastante intensas en parte por su riesgo de eliminación, lo que la puso bastante susceptible y en parte también por la actitud de Oriana Marzoli, que estuvo bastante agresiva con Tony Spina.

Parte de la audiencia comenta que la de Tony con Oriana y sus rupturas son estrategias para ser llamados a los realitys tanto de España como de Chile y que en realidad el tema de su relación poco tiene que ver con lo que dan a entender por las redes sociales o lo que muestran a las cámaras.

Oriana y Tony entraron al reality dándose a conocer como una pareja bastante conocida en España que ya habían pasado por otros realitys antes de "Amor a Prueba".

Han empezado a ser más conocidos ahora en Chile y han hecho florecer opiniones, tanto de apoyo como de repulsa. Oriana es más polémica que Tony y Spina ha demostrado ser más querido que ella, ya que durante el programa se salvo varias veces de situaciones que ponían en riesgo su permanencias gracias al apoyo del público.

Sea como fuere, la pareja afincada en España no ha dejado a nadie indiferente.

Tony encontró en el reality a los que serían grandes amigos de cara al final del reality.

Marco Ferri ha sido un gran apoyo para Tony dentro del reality, aunque el español también consolidó una buena relación con Hernan Cabanas y aunque menos intensa con Michael Murtagh y Pedro Astorga.

Oriana por su parte se encontró hacia la mitad del programa muy unida a Aylén Milla aunque hacia el final tuvieron algunos roces.

Cuando se hallaba enemistada con Eugenia Lemos y Michelle Carvalho Oriana pretendía mantener una especie de status quo que, tras la partida de ambas pudo permitirse el lujo de romper y crear cierta polémica con Romina Ansaldo, Pilar e incluso Liz Emiliano.

Han sido una pareja que ha dado bastante de que hablar y la que (vaticinamos) seguirá dando más bien pronto que tarde.