Los integrantes de la boyband británica One Direction siempre están en el punto de mira. Si bien hace un tiempo era por aspectos positivos, especialmente por el enorme éxito que han alcanzado a lo largo y ancho del planeta siendo tan jóvenes, ahora son portada de noticias debido a malos momentos que se les están viniendo encima.

Por supuesto y sin ningún lugar a dudas, el mayor palo que ha sufrido la banda musical ha sido el abandono de Zayn Malik, de 22 años, el mes pasado, dejando colgados a sus compañeros en plena gira mundial, la denominada "On the Road Again Tour", que ha estado levantando pasiones por el continente asiático últimamente.

Para colmo, el británico ha dejado One Direction no por problemas de estrés, como dijo en un principio, sino para emprender su carrera en solitario. No obstante, sus ex-compañeros continuarán como cuarteto y bajo el mismo nombre, para alegría de sus fans.

Ahora, los cuatro cantantes están disfrutando de unos merecidísimos días libres, que cada uno aprovecha para descansar y hacer lo que más le gusta. En el caso de Niall Horan, el joven irlandés, de 21 años, ha querido dedicar su tiempo a su gran afición (además de la música): el golf. Por ello, ha viajado hasta Augusta (Georgia, Estados Unidos) para ver cumplido uno de sus grande sueños, que no es más que poder ser el ayudante del magnífico Rory McIlroy, el número uno del mundo y amigo del cantante, en "The Masters".

Toda la jornada fue perfecta, hasta que llegó un momento un poco embarazoso para Niall, y es que, cuando acompañaba al golfista a que le hicieran una pequeña entrevista, el joven resbaló y cayó al suelo. Para colmo, la caída se hizo más aparatosa todavía al ir el irlandés cargado con un enorme bolso de golf, aparentemente muy pesado.

La reacción de Horan fue incorporarse rápidamente para evitar que se pudiera sentir demasiado avergonzado.

El chico ha recibido numerosos mensajes de apoyo que afirman que es algo normal que le puede pasar a cualquiera, por lo que no hay nada de qué avergonzarse. Además, Niall ha sabido comportarse con absoluta naturalidad y ha bromeado al respecto, diciendo que cuando se pasea por Augusta hay que andar con cuidado porque las hojas de los pinos te pueden jugar una mala pasada. Sin embargo, la gran experiencia vivida por el cantante, quien también tuvo la oportunidad de fotografiarse junto a Tiger Woods, supera con creces para él el "momento caída".