Muchas personas tienen el cabello rizado y les encanta cuidarlo y consentirlo. Sin duda un pelo rizado, crespo u ondulado sano, fuerte y lleno de vida atrapa las miradas, porque por naturaleza es sexy y atractivo. Pero muchas veces no se le dan los cuidados necesarios y adecuados, y es por eso que vale la pena conocer las mejores ideas y técnicas para lograr un buen cabello rizado y mantenerlo hermoso día tras día.
Si un cabello rizado no recibe los cuidados adecuados, se tornará en el típico cabello que tiende a ser difícil de manejar, por lo que muchas veces algunas personas deciden aplicarse tratamientos alisadores que causan un deterioro capilar y su beneficio es a corto plazo.
Entonces, se debe aprender cómo cuidarlo, porque el cabello no tiene que ser una pesadilla.
Tratamientos comunes
Un cabello saludable no solo se debe limitar a una buena hidratación. Es importante nutrirlo, y para lograrlo es necesario que se utilicen acondicionadores y champús específicos para cabello rizado y que sean a base de nutrientes naturales que ayuden a prevenir problemas comunes, como el envejecimiento, las puntas abiertas, falta de brillo, caída o problemas de cuero cabelludo. De igual manera, se pueden utilizar vitaminas que ayuden a hidratar el cabello y hacerlo más resistente.
Es importante saber que un cabello rizado se debe cortar aproximadamente cada dos meses, para retirar las puntas abiertas y dañadas, ya que éstas hacen que los rizos crezcan en forma de onda natural.
Lo mas recomendado son los cortes rectos y escalonados que aporten frescura al rostro y sean fáciles de peinar; esto ayudará a disminuir el exceso de volumen en el marco de la cara.
La hidratación es vital
Tener un cabello rizado significa un pelo constantemente seco. Esto es a consecuencia de sus curvas, ya que éstas provocan que su hidratación natural no sea constante, generando que muchas personas acudan a los centros de belleza solicitando tratamientos de hidratación y reconstrucción.
Para lograr dicho fin se deben elegir los productos de acuerdo a la necesitad. Los más recomendados son el yogur, leche combinada con miel y sábila (aloe vera).
La mejor manera de cuidarlo
Muchas veces los mejores hábitos para cuidar el cabello van más allá de cualquier tratamiento o mascarilla; hay cosas que parecen sin importancia, pero su práctica diaria trae grandes beneficios al cabello rizado.
Estas pequeñas cosas son las siguientes:
- El peinado: es importante evitar el uso de cepillos tradicionales. Si se utilizan colas, éstas deben ser rizadas o torcidas y que no maltraten demasiado. En el peinado, se deben utilizar peines anchos para desenredarlo, y es importante que se haga desde las puntas hasta el medio y, posteriormente, desde el medio hasta la raíz.
- El secado: lo mejor es que se utilicen toallas de algodón y evitar absolutamente frotar la tela en el cabello. En lugar de eso, es mejor un enrollado en la misma para que absorba la humedad, o realizar pequeñas presiones para que se absorba el exceso de agua.
- La almohada: al igual que las toallas, las telas de las almohadas deben ser las mas adecuadas para evitar el frizz. Las fundas de seda son ideales para prevenir el exceso de frizz en el cabello, así que se debe evitar utilizar fundas de algodón.
- El lavado: el lavado se debe realizar como de costumbre, con un champú adecuado, dos o tres veces por semana; siempre es importante aplicar el acondicionador intercaladamente para mantener la hidratación necesaria en el cabello.
Tipos de rizos
Muchas personas se quejan porque no encuentran la forma adecuada de cuidar su pelo rizado, ya sea porque no consiguen el rizo definido que desean, porque les ataca cruelmente el frizz o porque no pueden darle el brillo que debería tener.
La solución a todos los problemas está en aplicar y cuidar constantemente el cabello desde la raíz. Con estos pequeños consejos y técnicas no solo se logrará nutrir el cabello, sino que se verán cambios rápidamente.
Si lo rizos son muy definidos, resulta indispensable que se utilicen peines con puntas anchas, ya que estos ayudarán a peinarlo y desenredarlo con facilidad, además de ser mucho más cómodos. Pero se debe tener cuidado de no peinarlo en seco: de esta manera se evitará romperlo. Para dormir, es ideal que se haga con el cabello recogido en un moño alto para mantener los rizos en buena forma al día siguiente.
Ahora, cuando los rizos son ondulados, es válido utilizar -sin exagerar- onduladores o planchas para obtener una mayor definición.
Para la noche, a diferencia de aquellas personas que lucen un rizo muy definido, se puede dormir con una pequeña trenza para obtener mayor movimiento y forma el siguiente día.
En resumen, quienes amen sus rizos y deseen verlos a diario brillantes, con volumen, llenos de vida y fuertes, deben saber que requerirán de cuidados adicionales muy específicos y que su nutrición es fundamental. Cuando de hidratación y nutrición se trata, las mejores técnicas son las mascarillas y productos naturales, que nunca fallan.