Una nueva polémica nos alerta sobre la posible toxicidad de los labiales que empleamos para preservar nuestros labios del frío o para embellecerlos con un toque de color.

La noticia es que la OCU, en colaboración con sus homólogos de Francia e Italia, ha realizado recientemente un estudio sobre la presencia de los aceites minerales derivados del petróleos, los MOSH y MOAH. En concreto, se han analizado 58 marcas de labiales, de las cuales 20 se comercializan en España. Pues bien, en 13 de ellos se han detectado estas sustancias potencialmente cancerígenas.

Los 7 restantes estaban formulados a base de ceras naturales.

¿Qué son estos aceites minerales?

Los MOSH (Mineral Oils Saturated Hydrocarbons) y los MOAH (Mineral Oils Aromatic Hydrocarbons) llevan años alimentando las sospechas de la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria. Pese a la prolijidad de los estudios y a su revisión sistemática los resultados no son concluyentes y resulta necesario seguir investigando para determinar unas medidas más restrictivas sobre su uso.

Hasta la fecha la UE, en la normativa 1223/2009, autoriza su presencia siempre y cuando sea en concentraciones inferiores al 5 %. No obstante, cabe destacar que son precisos 20 años consecutivos de exposición a estos disruptores endocrinos para catalizar su daño a través de la sangre o la orina, pero ¿qué sucede con la contaminación cruzada?

Teniendo en cuenta que estos derivados del aluminio, la parafina, los parabenos, ftalatos, talco, PEG, benzofenonas... están integrados en multitud de productos de limpieza, cosméticos, textiles o como aditivos aromáticos o conservantes de infinidad de alimentos, cabe pensar que la acumulación combinada de sus efectos nocivos pueda acortar ese plazo de 20 años.

Y, precisamente, es ahí donde radica la incertidumbre dada la falta de datos objetivos por parte de la comunidad científica para rebatir esta hipótesis.

2.400 sustancias investigadas

De los 12.000 ingredientes que hasta hace poco se creían seguros se han analizado 2.400. De ellos, 1.200 son tóxicos o Contaminantes hormonales con capacidad para promover tumores.

¿Sabes que terminamos comiéndonos el 80 % de lo que nos aplicamos en los labios? Esto hace una media de 3 kilos por persona al año, una cifra nada despreciable si tenemos en cuenta que el cuerpo no puede eliminarlos.

Tal es así que se presume que muchas de las alergias, afecciones respiratorias, cardíacas, neurológicas e, incluso, el Cáncer son producto de la acumulación prolongada de estos derivados de los hidrocarburos.

En este contexto, el auge de la cosmética natural y orgánica, bautizada como toxic free, no parece casual o descabellada, ¿no crees?