Según un grupo de investigadores de la Universidad Tufts en Estados Unidos, cerca de la mitad de las muertes cardiovasculares se pueden evitar cambiando los hábitos alimenticios de los enfermos. A estas también se le suman los decesos ocasionados por ictus y diabetes tipo 2.
Según el informe, la conducta y costumbres alimenticias, pueden ocasionar e incidir en muchas enfermedades metabólicas y cardíacas. Para este informe se han analizado 10 Alimentos, entre ellos: frutas, verduras, frutos secos, cereales integrales, carnes magras y procesadas, bebidas con azúcar, productos con Omega 3 y la sal.
Como conclusión, han extraído que un 45 % de los enfermos cardíacos, consumían en exceso los productos más nocivos, como la sal y las bebidas azucaradas y por el contrario en su dieta faltaban los alimentos beneficiosos, como las nueces, las frutas y legumbres. Es el llamado “consumo subóptimo”. El grupo poblacional más afectado ha sido el de hombres jóvenes con un bajo nivel educativo. La población masculina de Estados Unidos lleva varios años manteniendo una alimentación de menor calidad que la femenina.