El primer ministro italiano ha explicado las medidas que tomará Italia para volver a la normalidad: la reapertura después de la crisis del Coronavirus se iniciará a partir del próximo 4 de mayo. A finales de semana el Gobierno presentará el plan que incluirá importantes diferencias entre los diversos territorios.

Desde el Ejecutivo consideran que sería una grave irresponsabilidad reabrir todo de golpe después de la crisis sanitaria que ha vivido el país.

A partir del próximo 4 de mayo se iniciará un programa a nivel nacional para la reapertura teniendo en cuenta las peculiaridades de cada territorio

Así lo ha anunciado el propio Giuseppe Conte, primer ministro del país europeo con el mayor número de víctimas mortales por el COVID-19, a través de su perfil en sus redes sociales.

En la publicación, Conte ha anunciado el comienzo de la denominada “Fase 2” del plan organizado por el país para hacer frente a la peor parte de la grave pandemia que ha sufrido por culpa del coronavirus, que ha golpeado con mucha fuerza al país. A lo largo de los próximos días llevará a cabo la presentación de todos los detalles, algo que tendrá lugar antes de finalizar la semana.

Los ciudadanos tendrán que usar mascarilla y respetar la distancia social hasta la distribución de la vacuna del coronavirus

En el Senado ya había adelantado algunos detalles sobre el futuro que le espera al país: uso de mascarillas y respetar la distancia social hasta que se haya encontrado y distribuido una vacuna. Sobre la polémica sobre una aplicación de seguimiento: será totalmente voluntaria, sin ningún tipo de sanción en caso de no querer descargarla.

Conte ha querido defender durante su intervención la importancia de emplear mascarilla y respetar el distanciamiento, aunque habrá una serie de modificaciones para tener en cuenta las condiciones especiales hasta que existan terapias realmente efectivas o vacunas.

En la lista hay cinco puntos que resumen el plan preparado por el Gobierno para hacer frente a la crisis sanitaria

Italia espera fortalecer los servicios de prevención para evitar un nuevo brote de contagios en uno de los sectores más afectados por la pandemia: las residencias de la tercera edad. Además, habrá estructuras que serán dedicadas en exclusiva al tratamiento del coronavirus y se espera lograr reducir la posibilidad de contagio para los pacientes y los trabajadores.

Conte espera aprobar una investigación a nivel epidemiológico que estará basada en diversos test serológicos y el lanzamiento de una aplicación de seguimiento que se podrá descargar de manera voluntaria y su no uso no tendrá ningún tipo de sanción ni consecuencia.