Las relaciones entre el PSOE y el Partido Popular han llegado a unos de los niveles más tensos que se recuerdan en muchos años tras las palabras del líder de la oposición en el hemiciclo. En un pleno muy encrespado, Pablo Casado se ha dirigido al Presidente del Ejecutivo diciéndole que era "partícipe y responsable del golpe de Estado que se está perpetrando en España". En clara alusión al proceso independentista que se está desarrollando en Cataluña.

Estas duras palabras del dirigente popular han tenido una réplica no menos ásperas por parte de Pedro Sánchez que ha decidido romper todas las relaciones con el Partido Popular.

Desde la tribuna en el Congreso de los Diputados ha llegado a expresar con una clara tirantez en su rostro que “si mantiene esas palabras usted y yo no tenemos nada más de qué hablar". Para a continuación replicarle en su turno de intervención con otra frase muy mordaz: “me ha acusado a mí, al presidente del Gobierno de España, de participar en el golpe de Estado”.

El PP utiliza a Venezuela para atacar al Gobierno español

La intervención del máximo responsable del Partido Popular ha estado llena de reproches hacia el ejecutivo socialista y no han faltado las alusiones a Cataluña. Al incidir en la sesión parlamentaria que “está sentado en el banco azul gracias a los votos de los independentistas".

También le ha recriminado a Sánchez de que no haya informado a la Cámara sobre lo que estaba pasando en esta comunidad autónoma.

De todas maneras, el momento de mayor tensión en la jornada parlamentaria ha sido cuando ha utilizado lo que está sucediendo en Venezuela como arma de ataque contra el gobierno español. Con la reacción muy airada de la bancada socialista que han llegado a gesticular como forma de protesta por estas alusiones políticas.

Sánchez pidió en tres ocasiones que se retractarse de sus palabras

Ante la intervención de Pablo Casado, el mandatario socialista se ha dirigido en hasta tres ocasiones para demandarle en su turno de réplica que si estaba en disposición de retirar las palabras que había dicho en sede parlamentaria. Algo que en ningún momento se ha retractado el dirigente popular y que al final ha provocado la reacción de Sánchez anunciando el cese en las relaciones entre los dos partidos políticos.

Aunque de momento no se sabe en cómo se va a sustanciar esta medida, ya que los portavoces de otros partidos lo han achacado como una estrategia para encarar las próximas elecciones autonómicas, que se van a celebrar en Andalucía en el mes de diciembre.