Este 2 de mayo el grupo separatista vasco ETA anuncia el desmantelamiento de sus estructuras tras casi 60 años desde su creación. A través de una carta fecha el 16 de abril y enviada a algunas instituciones el grupo anuncia el fin de sus actividades políticas.
El grupo fundado en 1958 e incluido en la lista de grupos terroristas por la unión europea es responsable por la muerte de más de 358 personas. Utilizando métodos como el asesinato, la extorsión y el secuestro buscaban luchar contra la represión del general Franco y formar un estado independiente con regiones del norte de España y el sur de Francia.
En el año 2011 el grupo anunció el cese definitivo de su lucha armada, desarmándose en abril de 2017.
¿Derrota o disolución?
En el texto, ETA afirma su decisión irrevocable de disolver sus estructuras políticas dando por terminado un ciclo de 60 años aproximadamente. Sin embargo, afirman que el conflicto continúa a pesar de su disolución. ETA reconoce el sufrimiento de las víctimas y pide no cometer los mismos errores. Comentan que se intentó encauzar el conflicto político por vías racionales pero no llegaron a un consenso con las instituciones gubernamentales. Se espera que este 4 de Mayo el grupo realice un acto en donde anunciarán su disolución definitiva.
Las reacciones del gobierno no se hicieron esperar.
El ministro del interior, Juan Ignacio Zoido, dijo que los integrantes del grupo debían de pagar por sus crímenes y que desde el gobierno no permitirían ningún tipo de impunidad. Afirma que ETA fue derrotada por los organismos de seguridad y sus integrantes tratan de confundir a la sociedad española.
El ministro informa que los miembros del grupo terrorista serán perseguidos para ponerlos a la orden de la justicia española.
El gobierno vasco no ha realizado declaraciones al respecto y su ejecutivo, Iñigo Urkullu, no tiene pensado realizado realizar declaraciones, según fuentes de EFE.
Las víctimas alzan su voz
Intelectuales y victimas del grupo, los cuales han hecho un recuento de 358 víctimas, han emitido un manifiesto donde advierten sobre las intenciones de la banda.
Para ellos el grupo pretende “poner el contador a cero” para evitar ser imputados por sus crímenes. Albert Rivera, líder de Ciudadanos, reclama justicia para las victimas mientras que José Luis Ábalos, secretario del PSOE, ha criticado el planteamiento de la organización terrorista.
A su vez, Consuelo Ordóñez, presidenta del Colectivo de víctimas del terrorismo acusa al gobierno de permitir a ETA tener renombre internacional. Para ella un ETA derrotado no puede ser protagonista de su propio final y critica la ineficiencia del gobierno al detener a los líderes de la organización. Para muchos ETA desaparecerá pero no desaparecerán los delitos y el sufrimiento de las víctimas.