Manuela Carmena, la jueza emérita y actual alcaldesa de Madrid ha hecho efectiva en el día de hoy una de las medidas más polémicas que tomó hace apenas unas semanas contra el Rey Felipe VI. Tras una consulta popular donde se decidió la permanencia del nombre del monarca en el segundo parque más grande de Madrid, los residentes votaron de forma afirmativa para eliminarlo. La decisión de la alcaldesa de 'Ahora Madrid' fue tomada por la Casa Real con "compresión" según fuentes de los representantes del gobierno de Carmena.

Los técnicos municipales suprimen el nombre de Felipe VI del parque

Después de que la anterior alcaldesa (Ana Botella) otorgara el nombre del monarca a la segunda zona verde más grande de la capital española, ha sido durante el día de hoy cuando los técnicos municipales han hecho efectiva la supresión de las letras de la valla que rodea el parque de Valdebebas. La decisión de Ana Botella en torno a utilizar el nombre del monarca para fines electorales y colocarlo en uno de los espacios más emblemáticos de la ciudad no fue bien acogido por la gran parte de los residentes, quienes mostraron su descontento por considerarlo "una pérdida de identidad" y de "tradición histórica".

La alcaldesa de Madrid convocó una votación vecinal

Tal fue el desagrado de los vecinos madrileños, que se movilizaron desde numerosas asociaciones vecinales de Hortaleza para eliminar esta referencia al Jefe de Estado. Con todo, la consulta fue propuesta por Manuela Carmena el pasado año y se votó masivamente a favor de eliminar estas referencias a Felipe VI, concretamente 1.700 vecinos votaron en contra.

La votación fue llevada al Ayuntamiento y más tarde fue rechazada tanto por el Partido Popular como Ciudadanos. Sin embargo, los votos a favor del PSOE y Ahora Madrid consiguieron que esta consulta no pasara ni siquiera por el pleno del Ayuntamiento.

El Partido Popular califica de "despilfarro" la supresión del nombre que añadió Ana Botella

El cambio de nombre está siendo enormemente comentado por el Partido Popular, pues además de estar en desacuerdo con esta supresión y prometer "cambiarlo de nuevo cuando recuperen la alcaldía de Madrid", han tachado esta modificación de "despilfarro", pues costará 35.000 euros. Un precio que el Ayuntamiento puede invertir en este cambio si tenemos en cuenta el superávit del mandato de Carmena al frente del Ayuntamiento. Eso sí, la alcaldía de Ana Botella estuvo plagada de irregularidades como la venta de pisos a fondos buitres.