Su muerte ha llegado de forma tan inesperada como el escándalo de las Tarjetas Black que le salpicó como Presidente de caja Madrid. Miguel Blesa, encontrado muerto por un disparo en una finca de Córdoba donde se hallaba de caza, es el punto y final de la vida de un banquero que finalmente no pasará por prisión. El ocaso de su vida, marcado por la serie de delitos que cometió al frente de la caja de ahorros más grande del país (y la cuarta entidad financiera, por delante de muchos bancos), empaña toda una vida llena de éxito y lujo que cosechó con la ayuda de su viejo amigo José María Aznar.
Aznar y Blesa, amigos desde la juventud
Es un secreto a voces que Aznar y Blesa eran amigos íntimos desde jóvenes, cuando se conocieron opositando juntos para trabajar en el Cuerpo de Inspectores de Hacienda. Junto a sus respectivos matrimonios, solían pasar juntos la mayor parte del tiempo libre que tenían. Esta relación amistosa fue clave cuando en 1996, con José María Aznar como nuevo Presidente del Gobierno, medió para que Blesa fuese el nuevo líder de Caja Madrid, una entidad financiera que crecería exponencialmente para después sufrir una estrepitosa caída en su renacer como Bankia, una caída que acabó costando un rescate que ya se sabe que el Estado no recibirá de vuelta.
Blesa, una imagen pública intachable
Durante su etapa entre 1996 y 2009 al frente de Caja Madrid, Miguel Blesa era un hombre reputado y uno de los banqueros más vitoreados por los grandes números que registraba su entidad. Era uno de los ejemplos y referentes gracias a una imagen pública que jamás se vio salpicada por ninguna de las fraudulentas prácticas que llevaba a cabo con total impunidad.
El control de medios que tenía formando parte del consejo de administración de Antena 3 (los hilos de Aznar llegaban a muchos estratos de la sociedad, y su buena relación con el matrimonio de Gloria Lomana y Josep Piqué fue muy productiva en ese aspecto) también reducía el impacto mediático negativo que cualquier aspecto de Caja Madrid pudiera tener en una de las tres grandes cadenas de la televisión, mientras otra se enfoca más al sensacionalismo y otra pasó la mitad de su tiempo bajo el control de un gobierno afín (por supuesto, el gobierno de José María Aznar).
Ocaso de Miguel Blesa
Como era de esperar, poco se sabe de su relación con José María Aznar desde que comenzaron a aparecer sus primeras imputaciones en 2013 por la compra especulatoria de entidades en quiebra y la venta fraudulenta de acciones preferentes que realizó Caja Madrid cuando él era el principal responsable. Todo se puso mucho peor para Blesa cuando saltó el escándalo de las Tarjetas Black, momento en el que ya le era imposible salir a la calle sin peligro de ser agredido o increpado por alguna de las miles de personas que estafó mientras él llevaba una vida de excesos con cacerías, yates, Ferraris y viviendas de lujo. Condenado a seis años de prisión que no llegó a cumplir por haber recurrido la condena, Miguel Blesa se marcha sin una resolución de su caso.