Durante el periodo democrático español han sido muchos los escándalos de corrupción que han golpeado a todos los partidos políticos. Estos casos de corrupción se han ido incrementando durante las dos últimas décadas, sobretodo el partido más golpeado por los corruptos ha sido el Partido Popular, con una cantidad de casos y de imputaciones casi incontables.
Una de las comunidades más corruptas de España, la Comunidad Valenciana, con un Gobierno perenne del Partido Popular desde el inicio de la democracia, ha sido en gran medida golpeada por esta trama de corrupción, en la que destacan el caso Gurtel, por el cobro de diferentes empresas, por parte del gobierno autonómico que dirigía Francisco Camps.
En los últimos años se han destapado también el caso Fabra en Castellón o más reciente el caso Rus, todos ellos por el cobro de comisiones ilegales de diferentes empresas a cambio de favores.
Otro epicentro de corrupción es la Comunidad de Madrid, en la cual el caso más representativo es el caso Bárcenas y la contabilidad B del Partido Popular, que conlleva una gran presencia policial en la sede del PP madrileño en su sede en Génova trece. Otro caso de importante relevancia es el caso Rato y las tarjetas black, por medio del cual el banco creado por una cohesión de distintos bancos, casi en la quiebra absoluta, fue dirigido por Rodrigo Rato, director del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Este caso no solo ha quedado en evidencia por los cobros ilegales, el despilfarro que se hizo, después de la creación de las tarjetas black, sin mesura y las preferentes que se lanzaron después de la entrada en bolsa de la entidad bancaria, que arruinó a miles y miles de personas, que fueron estafados.
Estos son algunos de los múltiples casos de corrupción del PP en España, a todo esto hay que sumarle su absurda gestión y el despilfarro de dinero público, en viajes, comidas, suvenirs... Este es el partido marcado por la corrupción, que se dedica durante su periodo al frente del gobierno a enriquecerse y a liderar en solitario, por eso ahora no tiene como pactar ni con quien dialogar.