Diego Costa ha recibido una sanción de 8 partidos tras ser expulsado en el partido que enfrentó al Atlético de Madrid y al Fútbol Club Barcelona el pasado fin de semana en el Camp Nou, con un resultado final de 2-0 para el equipo de Ernesto Valverde.
En dicho partido, Diego Costa fue expulsado en la primera parte del mismo por, tal y como viene reflejado por el árbitro, dirigirse a él con estas palabras: "Me cago en tu p... madre".
La sanción ya viene siendo controvertida desde el primer momento en el que se produjo, dado que el propio jugador expresa que no tenía que ver con el árbitro, sino con él mismo.
Esto además ha venido añadido a las quejas manifestadas por los jugadores como Koke, que al finalizar el partido se mostraban indignados con la situación y las últimas actuaciones arbitrales en el Camp Nou.
La sanción más dura desde 2009. ¿Excesiva?
En el año 2009, el central portugués que en aquel entonces jugaba en el Real Madrid, Pepe, recibió una sanción de 10 partidos por una agresión a Javier Casquero.
La sanción de Diego Costa se fundamenta, en primer lugar, en cuatro partidos de sanción por insultar al árbitro, así como otros 4 más por agredir de forma leve al árbitro.
Viendo diferentes antecedentes y salvando el absurdo debate lanzado por el jugador, resta únicamente apoyar al comité de competición así como entender como justa la sanción.
Siendo incluso un punto negativo que esto no se produzca más pronto, llegando sanciones de este tipo tarde a efectos de las alturas de calendario así como de años. Siendo tópico, los futbolistas tienen que dar un ejemplo y por supuesto no se deben olvidar las múltiples acciones sueltas que futbolistas del Barcelona como Suárez o Busquets han realizado.
Sin embargo, excusarte en el comportamiento del otro no provoca que uno deba escurrir el bulto así como su responsabilidad.
Costa, en el club de los reincidentes
Siendo además Diego Costa un jugador que para nada va a aprender de este hecho, no está de más recordar a los futbolistas que lo primero que deben mostrar en el campo son valores y respeto.
Además, añadido a esto se pueden entender confesiones en caliente y defensas de intereses de los equipos.
Sorprendentes han sido las declaraciones de Valverde en rueda de prensa a favor de rebajar la sanción del comité.
Son casos puros de demagogia por parte del periodismo deportivo, pero seamos honestos: ¿Merece el árbitro este trato? ¿Se puede justificar o tratar de entender la violencia?
Cabe repetir que se debe sancionar todas las acciones así como a todos los equipos. Pero más que sancionar, debemos educar. Así pues, el comité actúa de la manera correcta. Esperemos que esto no sea un caso aislado en lo que sanciones ejemplares se trata.
