Puede que la ópera no te interese lo más mínimo, y que no sea de tu agrado. Pero este artículo no está relacionado con la ópera en sí, sino con el edificio más emblemático de Noruega, la ópera de Oslo. Un edificio que, con tan solo diez años de existencia, ha sabido englobar una serie de características propias de su sociedad. En este artículo te contamos porqué y en qué consiste el proyecto "Fjord City".
Sí, la ciudad de los fiordos.
Qué es el proyecto "Fjord City"
Es un proyecto que se inició en la década de los ochenta y que nació con el objetivo de dar un lavado de cara a los muelles y a las zonas industriales de la ciudad de Oslo. Toda una remodelación arquitectónica de la capital con una arquitectura propia del Arte de vanguardia y de diseño moderno. Particularmente me recuerda a la escuela de arte Bauhaus pero no entiendo de arte y cualquier comentario que haga de este tipo no debe tomarse demasiado en serio.
El inicio del proyecto fue construir el barrio Akker Brygge y el Tjuvholmen.
En este último se encuentra el Museo Astrup Fearnley. También se modificó la barriada conocida como Barcode, en Bjorvika, otro barrio de Oslo.
El edificio de la ópera
Se encuentra en el Puerto de Oslo. Lo diseñó el estudio de arquitectos de Noruega, el estudio Snohetta. Como el Cristo en las Santísimas Escrituras, está situado a la derecha pero no del Padre Celestial sino del puerto. Las personas que quieran visitar este edificio emblemático de Noruega pueden hacerlo durante todo el año. Desde su techo pueden disfrutar de vistas de toda la ciudad y del fiordo de Oslo. Gracias a sus ventanas de cristal a ras del suelo, asemejándose a los que tenían los pabellones de la Expo 92 de Sevilla, los visitantes pueden observar las actividades y ensayos de los talleres de la Ópera de Oslo.
La madera de roble con la que está construido el interior del edificio muestra el portentoso esfuerzo que han hecho los arquitectos por mostrar la hermosa fortaleza de esta construcción.
Fuerte como una voz de soprano y de saludable condición, la Ópera de Oslo muestra su vestíbulo principal con forma de herradura, con tres escenarios. Más de mil espectadores pueden asistir al Auditorio Principal. El segundo auditorio puede albergar hasta cuatrocientos, y el Estudio, doscientos. Pero la Ópera de Oslo solo necesita una condición para ser observada: que vayas a verla y que te encante por su poderío artístico. Entonces, amarás la ópera.