En el corazón de la bella Barcelona fueron arrebatados antes de ayer cientos de corazones porque así lo decidió un gran descerebrado mental cuando puso en marcha el plan terrorista que le habrían encomendado sus superiores y que llevaría planificado algún tiempo atrás. Y entonces yo me pregunto; ¿dónde está la humanidad? Porque seres humanos veo muchos, pero humanidad poca. Es lamentable que nosotros como seres racionales podamos llegar a hacernos tanto daño, podamos llegar a asesinar a sangre fría al que tenemos al lado.

Decidamos coger una furgoneta y ponernos a atropellar a personas inocentes que tan solo querían pasar un día tranquilo como otro de tantos que les esperaba en sus vidas pero que por desgracia ni fue tranquilo ni les esperó ninguno más.

Es lamentable, es despreciable, es muy triste que siendo poseedores de grandes cualidades hagamos uso de ellas para sembrar el terror antes que la paz. Muchas veces me han dicho, de broma, "¡serás animal!", y parece cómo que me tenga que ofender por eso; pues no, es un orgullo que en el mundo en el que vivimos le llamen a uno "animal": son seres muchas veces mejores que los propios humanos. Si te llaman "humano" casi que deberías sentirte ofendido.

Tras lo sucedido en Barcelona no he parado de leer en las redes sociales comentarios de ánimo, como es normal, comentarios de rabia, comentarios de dolor, comentarios de búsqueda de personas y niños desaparecidos, pero lo que más me ha llamado la atención han sido los comentarios de justificación.

¿Por qué tienes que justificarte? ¿Acaso los representas? ¿Quién te pide que lo hagas? No te justifiques. No lo hagas, es absurdo. No hay religión que llame al terrorismo, así que no te justifiques por favor. Además, creo que con esto quiero lanzar un mensaje: hay personas que se están muriendo, personas en estado crítico; no es momento para justificarse.

Hay cosas importantes y otras que no lo son tanto.

En relación con lo anterior, también he leído críticas hacia aquellos que solamente hablaban en catalán. ¿De verdad es tan sumamente importante? Existe algo que se llama la balanza de la vida y en situaciones así el peso caería única y exclusivamente hacia un lado; ya saben a lo que me refiero.

Hoy todos somos Barcelona, pero también somos Siria, Irak, Palestina, Líbano, París, Bruselas, Londres, Turquía, Somalia, Níger, Libia, Afganistán, Pakistán, Yemen y el Mundo Entero.

Luchemos para conseguir un mundo donde nos matemos a besos y a abrazos y nuestra condena sea amarnos para siempre.