Esas voces que se escuchan en una película o serie...y que en más de una ocasión se piensa: "¿Esta voz me suena de algo o me lo estoy inventando?". Y quién no reconoce al mítico Constantino Romero en todas y cada una de sus labores de doblaje. Detrás de todo ese entretenimiento, de engancharse también a una serie u otra, están los dobladores. Por eso, cada 12 de junio se celebra el Día Internacional del Doblaje.
Antecedentes del Día Internacional del Doblaje
En este día se busca celebrar el duro trabajo que los actores de doblaje o dobladores hacen detrás de un micrófono, durante horas, dando voz internacional a los personajes.
Así, mediante un proceso de regrabación del diálogo se hacen dos cosas: cambiar el idioma de la versión original o mejorar la calidad e intencionalidad del audio.
Todo empezó a finales de los años 20 y a principios de los años 30. Inicialmente, el material con el que se trabajaba era fotográfico y no digital, por lo que se grababan varias veces el texto previamente memorizado. Así, las escenas se ensayaban hasta más no poder y se grababan las veces que hiciera falta, hasta lograr una buena sincronización de los movimientos labiales de los actores. Con el paso del tiempo, se pasó al sistema de doblaje por ritmos, que consta de segmentar el diálogo en pequeños takes que los actores de doblaje graban tras haber memorizado el ritmo, sobre todo las pausas, del original.
Según Salvador Najár, especialista en doblajes, el origen de este es cuando Louis Lumière hizo un cortometraje del desembarco de un grupo de congresistas franceses en Neuville-sur-Saône, para celebrar un congreso de fotografía. En la grabación se ve al alcalde de Neuville, el señor Lagrange, hablando con el astrónomo Pierre Janssen.
Pues bien. La grabación se proyecta un día después de esta llegada y son los propios protagonistas de la conversación los que, detrás de la pantalla, reproducen las palabras a los espectadores. Este momento es por el cual se celebra el 12 de junio el Día Internacional del Doblaje.
El doblaje en todo el mundo
A finales de los años 20 y principios de los años 30, llega el sonido al cine y, por razones políticas propias de los nacionalismos de la época, se decidió doblar los proyectos audiovisuales para marcar la identidad del país y controlar cierta información, que podía verse en las proyecciones.
Así, los países que escogieron el doblaje como la forma de reproducción pública fueron España, Alemania, Italia y Francia. Así, en 1928 Paramount realizó la primera prueba con "The Flyer" y en 1932 se fecha la primera película doblada, "Entre la espada y la pared".
A partir de este último año, se generalizó mucho más el doblaje. En España fue gracias a que la Segunda República lo introdujo en Madrid y Barcelona y, tras la Guerra Civil, se reforzó por una normativa del Gobierno franquista que estaba basada en la Ley de Defensa del idioma de Mussolini; ley que también adoptaron Alemania y Francia. El objetivo de esta reglamentación jurídica era: remarcar el nacionalismo, a través de la identidad lingüística y controlar lo que se proyectaba a través de la censura.
En Latinoamérica el doblaje se inició en México en plena época dorada, durante la Segunda Guerra Mundial. En 1938 Disney estrenó la primera película íntegra en español "Blancanieves y los siete enanitos". Dada la variedad de acentos, para la siguiente película ("Dumbo"), se decidió grabar en un solo lugar, donde el país escogido fue Argentina.
Fue en 1942 cuando la Metro Goldwyn Meyer reunió a un grupo de actores de doblaje neoyorquinos y los mandó a México para doblar las películas y los cortos, como los de "Tom y Jerry", para toda Latinoamérica.