Un sombrero militar que al parecer perteneció a Napoleón Bonaparte se vendió por 350.000 euros en una subasta este lunes, lo cual demuestra la fiebre presente todavía por todo lo relacionado con el emperador.
El precio final superó por bastante a los 30.000 o 40.000 euros que inicialmente se estaba vendiendo. Se trata de distinguido sombrero "bicorne", que Napoleón usaba de costado, en lugar de puntos en la parte delantera y trasera, para poder ver mejor en el campo de batalla.
Napoleón Bonaparte llego a usar 120 sombreros
El sombrero era uno de los 120 sombreros de dos esquinas o picos que Napoleón usó durante su administración entre los años 1799 y 1815, como cónsul y emperador.
Las investigaciones han dado con el paradero de 19 sombreros restantes que han identificados distintos historiadores. La mayoría de estas reliquias están ahora ubicadas en distintos museos. Los objetos del emperador Bonaparte siguen siendo de interés y de un valor significativo. El fundador y el presidente de alimentos, Harim de Corea del Sur, en medio de una subasta en el año 2014, logró comprar uno de los sombreros pertenecientes a Napoleón por un precio de 2 millones de dólares.
El sombrero que pertenecía a una colección propiedad de la familia real de Mónaco, se logró vender por medio de la subasta al propietario del gigante de la alimentación y la agricultura de Corea del Sur, Harim, hace cuatro años.
Según la historia este sombrero lo obtuvo un capitán dragón holandés como un trofeo de guerra luego de la Batalla de Waterloo, el 18 de junio de 1815, donde ejércitos europeos ganaron la batalla contra los franceses.
Un hombre de muchos sombreros
La historia cuenta que el emperador Napoleón usó 120 sombreros similares durante su vida y este último vendido era uno los 19 sombreros de Napoleón que creían que todavía existía.
Se esperaba que fuera vendido por menos de 40.000 euros, pero para sorpresas se vendió por 350.000 euros, destacando la inclinación que todavía existen por las pertenecías del emperador
Normalmente tenía 12 sombreros en servicio, cada uno con una vida útil de tres años. Fueron renovados a razón de cuatro por año, y los valets los usaron por primera vez para repartirlos por el emperador francés.
Las pertenecías de Napoleón han contado con gran demanda y a menudo han enviado los precios en espiral por encima de las estimaciones. Por ejemplo, el mes de noviembre del año pasado, una frágil hoja de laurel dorado de la corona para la coronación de Napoleón en 1804, con un peso de tan solo 10 gramos, se vendió por 625.000 euros.
