En la industria del Cine, parece que una de las figuras más intocables fuese el de director. Los realizadores parecen ser los reyes del mambo y los que dirigen al cotarro a su antojo. Sin embargo, nadie queda excluido de la negra mano del despido.
A lo largo de la historia, han sido varios los directores de cine a los que les han puesto 'de patitas en la calle' en mitad del rodaje de una película. Cuesta entender qué es lo que puede hacer un director para que sea despedido. Un mal carácter o una falta de profesionalidad serían más que suficientes para una decisión tan importante.También, el tan ya comentado acoso sexual.
Sin embargo, ninguna de estas ha sido la causa más habitual en este tipo de situaciones. La razón principal: el conflicto de intereses.
A continuación os dejamos con algunos de los casos más famosos:
Steven Soderbergh en Moneyball
Steven Soderbergh fue reemplazado por Bennet Miller debido a la concepción que él tenía en mente sobre la historia de Moneyball. Él dentro de su mente innovadora quería crear una mezcla entre el género documental y la ficción. Los productores no terminaron de entender esta visión y tras varias disputas optaron por su despido. La película terminó siendo una de las mejores de ese año y nominada a 6 Oscars.
Brenda Chapman en Brave
La realizadora Brenda Chapman quedó totalmente descolocada cuando le anunciaron su despido.
La directora había dedicado mucho esfuerzo en el proyecto y había perfilado la película en base a la relación que mantenía con su propia hija. Sin embargo, Pixar debió pensar que esta relación era demasiado oscura para su película y decidió prescindir de ella ofreciéndole el largometraje a Mark Andrews.
Alex Cox en Fear and Loathing in Las Vegas
Alex Cox fue sustituido por Terry Gilliam. Esta película fue una de las más deseadas por los directores del momento, todos querían ser los realizadores de este largometraje. Al final, la productora Rhino Films seleccionó a Cox. Cox realizó un primer intento de guion introduciendo algunas secuencias de animación que resultaron ser una ofensa para el propio Thompson, periodista sobre el que trataba la película.
Él mismo fue quien pidió el cambio de director en favor de Terry Gilliam, o se opondría a que el proyecto se rodase.
Dick Richards en Jaws
A día de hoy, parece inconcebible que una de las películas más aclamadas de Steven Spielberg no fuese, en un principio, pensado para él. La dirección le vino de la forma más cómica posible, pues el único motivo de despido de Dick fue su 'mala' costumbre de llamar 'ballena' al tiburón. Una de las razones más absurdas por las que alguien ha podido ser despedido.
Phil Lord y Christopher Miller en Solo: A Star Wars Story
El último caso conocido es el de estos dos directores que fueron despedidos para poner en su lugar a Ron Howard. En este caso, todo parece apuntar al gran poder que ejerce la productora Disney, muy poco dada a salirse de lo que considera como 'seguro' y menos aún, a ceder terreno en el aspecto creativo.