El mundo de la televisión es muy cruel, sobre todo cuando se trata de Series jóvenes que dan sus primeros pasos en el universo televisivo. Muchas series acaban nada más terminar el episodio piloto, ya sea por desavenencias con la productora, por una mala audiencia o por insuficiencia monetaria. Muchas son las razones de que una serie pueda o no triunfar en televisión, pero en ciertas ocasiones son las malas críticas las que dejan caer la guillotina. El caso de Juego de Tronos tuvo un tinte parecido a esto último, pero siguió adelante y acabó triunfando.

Primeras críticas a la serie

"Es a la televisión lo que es el musical de Spider-Man a Browadway", esta es la crítica que recibió desde 'Orlando Sentinel'. Ese era el título de la crítica, algo poco alentador, pero continua con su razonamiento:

"Uno de los mayores estrenos de esta primavera no es más que una gran decepción. ¿Por qué es una serie tan enrevesada y torturadora?."

Cierto es que la historia de Juego de Tronos sufre de superpoblación, es innegable que el univero creado por George R.R. Martin supone la introducción de cien personajes nuevos (exageración) para poder llenar los huecos argumentativos y de guión.

Otra de las "grandes" críticas del comienzo de Juego de Tronos fue esta: "Es una ficción de chicos muy condescendientes que solo pretende llegar a la otra mitad de la población. Muestra demasiada confusión como consecuencia de no tener una gran idea, todo más allá de esa nociones vagas de que la guerra es lo peor, que las familias son manipuladoras y engañana y que el poder es lo más tentador. Si te gusta la temática de Dragones y mazmorras, quizás te guste".

Esta fue la crítica de 'The New York Times', algo que a mi entender acierta de pleno. Los temas que trata dicho escrito capturan magnificamente lo que es el sustento o esencia de la serie: Dragones, familias manipuladoras, el poder que todos quieren y que la guerra trae desgracias.

"Aquellos que disfruten con la lectura puede que enloquezcan con esta nueva serie. El resto de los mortales lo pasaremos mal viendo Juego de Tronos", palabras de 'Boston Herlad'.

Y para volver al tema de los dragones, añadiendo algunas "tetas" por el camino (todo hay que decirlo), la crítica de 'The Washington Post':

"Todo lo que hay que decir de la serie es que, incluso para aquellas super mentes abiertas que habitan la tierra, Juego de Tronos puede ser una pieza adormilada... Se toma muy en serio la lingüística de 'ustedes' y 'vos'. Es un grupo de fantasía emparejado a Dragones y mazmorras que ahora emerge desde el foso de burlas y críticas que ha soportado desde siempre."

¿Tenían razón?

La pregunta la dejo para que cada uno saque sus conclusiones y quiera responder en los comentarios, pero a mi parecer hay de todo en esas críticas.

Juego de Tronos se basa en aspectos ya muy quemados de la temática y se desliza como un alarde de pechos femeninos y efectos especiales para deleitar a sus seguidores. ¿Qué es sin eso? Pues dragones y mazmorras.