Por si fuera poco con las compras de Marvel Entertainment (en 2009) y Lucasfilm (en 2012), aparte de lo que ya tenían en su haber para entonces, disney ha anunciado que son pocos los frentes rentables que quieren abiertos y que aún quieren más. Esta vez han puesto sus ojos en los cada vez más solicitados y rentables servicios de streaming, con Netflix a la cabeza, y la compañía dirigida por Bob Iger ha anunciado que van a lanzar su propio servicio, con todo el catálogo de la compañía disponible hasta el momento, aunque este cambio no se hará efectivo hasta dentro de dos años.

¿Por qué esperar hasta 2019?

No se trata de un movimiento casual ni repentino por parte de la compañía, sino que se lleva trabajando desde hace un tiempo en la idea de sacar su propia plataforma de películas en streaming. Si es así, ¿por qué van a esperar tanto para lanzarla? Como suele pasar en estos casos, la respuesta es por acuerdos legales. Disney actualmente tiene un contrato de exclusividad con Netflix para albergar todo su catálogo y poder publicarlo en su plataforma, y ese contrato no termina hasta 2018. Por supuesto, tras ese tiempo no se tiene ninguna intención de renovarlo, y menos aún con la noticia con la que nos encontramos hoy.

Y decimos que no se trata de una idea repentina porque Disney ya lleva un tiempo trabajando en conseguir crear una plataforma que esté a la altura de la demanda que podría generar todo su catálogo en exclusividad.

Este mismo año se convirtió en el accionista mayoritario de BAMTech por más de 1.500 millones de dólares, empresa encargada de retransmitir vía streaming las principales ligas de béisbol norteamericanas. Este primer paso estaba pensado para que su filial ESPN, donde retransmiten todo tipo de eventos deportivos, comience a emitir este mismo año por internet, ya contando con toda la tecnología y medios previos de BAMTech.

Gran catálogo, pero a qué precio

Es un movimiento bastante arriesgado por parte de Disney, porque si bien es verdad que contará con un extenso catálogo entre clásicos y obras más recientes, aparte de las que se irán sumando en los próximos años con más películas de superhéroes y de Star Wars, en un principio no podría competir con otras plataformas más veteranas y heterodoxas como la propia Netflix.

Otra parte importante será conocer cuál será el precio de suscripción a su plataforma, y qué tipo de ofertas por suscribirse a otros medios tendrá. De momento en el aspecto económico no se han conocido datos, aunque los inversores no parecen muy confiados con la propuesta ya que la cotización de Disney en bolsa ha bajado un 5% desde que se conoció la noticia. Tendremos que esperar un poco más para conocer más detalles de este arriesgado movimiento.