Para los que no conocen la historia, el Corral de Comedias de Almagro, una corrala que tiene sus orígenes en el siglo XVII, en pleno barroco, es el escenario central que vio nacer el festival. El espacio se mantuvo gracias a los diversos negocios que se desarrollaron allí, entre ellos el mesón. Este tipo de teatros populares son únicos en Europa, solo el centro Shakespere, “The Globe” en la rivera del Támesis en pleno Londres, muy cerca del puente del siglo frente a Sant Paul, nos ha acompañado en esta antigua oda de juglares.

Fue en el siglo XX, cuando el Corral de Comedias fue declarado Monumento Histórico-Artístico en 1955.

Entre los años 1953 y 1962 se restauró. Tras años de representaciones y éxitos con los clásicos españoles como Lope de Vega, Lope de Rueda, Calderón de la Barca... fue en 1977 cuando se creó el festival. Fue la década de los 80 se consolidó la tradición del festival y la oferta escénica que todos los años podemos disfrutar en el mes de julio. Como consecuencia de ello se creo en esa década la CNTC (La Compañía Nacional de Teatro Clásico), que tiene su sede en Almagro, en el Hospital de San Juan a partir de 1994.

La semana nos ha regalado ya un par de obras y la entrega del premio Corral de Comedias a José Sacristán por toda su carrera. “No voy a olvidar jamás este reconocimiento. A mis 80 años es un antes y un después tan gozoso, tan formidable, como el hecho de que voy a poder seguir jugando”.

Un actor inmortal en nuestra escena que ha sabido abordar como nadie el trabajo en cine como teatro y televisión. Pero es su evolución y el paso sin pausa por los escenarios del teatro clásico español, el que le ha dotado como un actor inmortal de nuestra dramaturgia.

Durante el día 7 y 10 de Julio se llevaron a cabo las obras clásicas cervantinas y de Shakespeare y Rostand.

Las verdaderas aventuras de Don Quijote de la Mancha fue el espectáculo que abrió el festival en el Espacio Miguel Narros. La obra recrea una imaginada ficción a partir de la segunda parte de El Quijote, en la que el famoso caballero intenta evitar que se imprima el falso texto que escribió Avellaneda. Es una obra oba repleta de imaginario, un tanto lunático, en un escenario que se mueve entre la realidad y la ficción, entre la locura y la razón.

La obra se desarrolla entre audiovisuales, títeres y actores muy en la línea de los nuevos enfoques del Quijote, una obra que siempre se mueve en una constante modernidad.

Romeo y Julieta, interpretada por la compañía mexicana los Colochos, presentó en el teatro municipal. Esta versión del clásico de Shakespeare se ubica en un páramo mexicano, es la historia de amor entre dos personajes ramón y Hortensia, una pareja de amantes de pueblos diferentes. El director Juan Carrillo, hace hincapié en la experimentalidad de la obra, basada en la lengua indígena, y desarrollada a través de la emotividad y un escenario precolombino.

La programación se desarrollará hasta el día 30, una innumerable oferta de obras en los diversos escenarios del festival, más de sus 20 puntos como el Corral de Comedias, el Hospital de San Juan, la Antigua Universidad Renacentista, el Espacio Miguel Narros, teatro Municipal, teatro dela Veleta...

Plaza Mayor. La oferta es muy amplia y con una variada visión de la comedia española desde la perspectiva de la obra clásica hasta nuevas propuestas de estos textos. Teatro sí, pero también cine, música y otros eventos.

El Corral de la Comedia inauguró ayer la obra el Divino Narciso, de la compañía Teatro de la Rendija. La seguirán Jacara de Pícaros, La Calderona y Don Gil de las calzas verdes, y por último El rufián dichoso de la Compañía de Producciones teatrales Siglo de Oro (Unir y fundación siglo de oro). Serán las obras que se lleven sobre las tablas del escenario central del Teatro de Comedias de Almagro hasta final de mes.