"No puedo creer que hayan sido tan idiotas como para comprar esta mierda". Con esa frase a propósito de su propia obra, Bansky respondió a Sotheby's cuando esta importante casa de subastas vendió siete de sus grafitis por más de 400.000 US$, convirtiéndose en todo un récord en el mundo del street art. El récord de Banksy, eso sí, lo tiene la pintura Keep it spotless, vendida por Sotheby's en 1.870.000 US$ en 2008.

Bansky es el seudónimo detrás del cual se oculta un artista callejero anónimo del que apenas se conocen datos sobre su persona. Se sabe que nació en Liverpool, quizá en 1974.

Su trabajo se ha caracterizado por la crítica social y el humor y la ironía con que sus imágenes atacan al capitalismo y al sistema imperante.

Este año, el Arte de Bansky se ha colado en Gaza, dejando en varios murales sus grafitis, publicados en la web y en su cuenta de Instagram. Sin embargo, no es la primera vez que sortea el aislamiento de la franja. Ya en 2005 pintó sobre el muro levantado por Israel una niña elevándose con globos de helio, un grupo de palestinos con el mismo tipo de traje usado por los judíos en los campos de concentración nazis, por citar algunos de los grafitis que hizo allí. En esta ocasión, siguiendo por los mismos derroteros de la ironía, las imágenes, entre otras, son: unos columpios infantiles que giran, siluetas de Niños, una tétrica torre de vigilancia israelí y un gato especialmente kitsch en un solar lleno de escombros causados por los bombardeos.

El artista subió también a su web personal un pequeño documental de unos dos minutos titulado Make this year YOU discover a new destination. En la grabación podemos apreciar cómo juega con la terminología publicitaria de viajes, e incluye imágenes de soldados israelíes y bombardeos, así como una Gaza destrozada por el desastre.

El microdocumental termina con el plano de una pintada en letras rojas sobre un muro blanco en el que podemos leer: "Si nos lavamos las manos en el conflicto entre los poderosos y los que no tienen poder, nos ponemos del lado de los poderosos: no nos mantenemos neutrales"