Nos encanta ver la publicidad de éstos robots, cómo van recorriendo la casa y succionado todo el polvo mientras la señora está leyendo un libro. Espabila, esto no es tan así.
No son tan silenciosos como nos lo hacen creer, no solo hacen un zumbido cuando recorren la casa, sino que son tan torpes que se llevan las sillas por delante y el "rrrr..." de las patas arrastrando por el suelo es para erizarte los pelos.
Algunos también hablan cando terminan su tarea o tienen jocosas tonaditas cuando sufren un error.
Que se carguen solos, pues esto es a veces, no siempre. Si la base de carga está en una habitación, y ellos se encuentran en otra, pues es como si se hubieran perdido en una jungla aunque estén en un cuarto de dos por dos.
Por supuesto que quitan el trabajo de barrer, pero esto es parcial, algunos no entran debajo de los sofás, o de algunos muebles que tenemos en casa. Algunos son barredores no aspiradores, sus cepillos giran y atrapan la suciedad y la aspiran al depósito, así que seguro que algo siempre queda en el suelo.
El problema es que hace un efecto de fuerza centrípeta, y expulsa partículas de polvo. Algo importante: la suciedad no se esfuma mágicamente, así que hay que vaciar el depósito frecuentemente, que por otro lado es muy pequeño.
Algunos parecen tener una inteligencia artificial de películas de ciencia ficción, según cuentan los que tienen estos artilugios, siempre se les queda parado en los lugares más inaccesibles, como en el rincón más alejado, debajo de la cama, o debajo del sillón. Seguro es que se enrede con los cables del ordenador o con los cordones de las zapatillas, y hasta los hay que se han llevado pegado su base de carga y sale a barrer con ella encima o decida bajar las escaleras tipo suicida.
Cuidado con plantas, jarrones, o cosas que se puedan romper a consecuencia del ímpetu de estos atolondrados robots que se dan de cabezazos con lo que se ponga enfrente.
La escoba siempre la tendremos que tener a mano, estos aparatos no harán que desaparezcan de nuestros hogares, por lo menos por el momento. No pienses que los baratos son iguales a los caros, no, si quieres comprar uno será mejor que pienses en gastar por encima de los trescientos euros, porque son los que tienen mejor sistemas de absorción de suciedad y mejor sistema de navegación, sino te verás en problemas con tu robot cuando decida ir a barrer el jardín.