Ya no es novedad el inminente cambio climático al que se enfrenta el planeta Tierra. Los estudios científicos demuestran un incremento en las temperaturas globales que, lejos de detenerse, continúa su curso. Por causas naturales o por acción irresponsable del hombre -más conocido como "el efecto invernadero" -, lo real es que todos los habitantes del planeta se enfrentan a los cambios del clima, incluidas por supuesto, las plantas. Los animales han debido modificar hábitos y desplazarse en busca de condiciones acordes a sus necesidades: agua, refugio, alimento.

Una exhaustiva investigación da cuenta de que, al igual que la especie animal, la vegetal ha tenido que desplazarse para poder sobrevivir a las alteraciones de temperaturas.

Partiendo de la base de que cualquier tipo de planta necesita de un medioambiente particular para desarrollarse de forma óptima, un grupo de investigación de la Universidad de Washington (Seattle), realizó un análisis diacrónico de plantas en ciertas regiones de Estados Unidos con el objetivo de registrar cambios o modificaciones en las zonas de crecimiento. El trabajo de campo consistió en el examen de 300 especies a lo largo de 40 años en 7 regiones de América del Norte.

Las expectativas y los resultados. De acuerdo al cambio climático, lo que esperaban los investigadores era que, ante el aumento de la temperatura, las plantas tendieran a desplazarse a zonas más frías como un modo de compensación, es decir hacia arriba.

Sin embargo, se sorprendieron cuando observaron que la mayoría de las especies vegetales había migrado hacia abajo, es decir a zonas con mayor temperatura. Luego, al evaluar otros factores comprometidos en el crecimiento y la supervivencia vegetal, detectaron que el movimiento descendiente de algunos tipos de plantas era la consecuencia de la búsqueda de zonas más bajas que, aunque más cálidas, también más húmedas, con mayor disposición de agua.

En este sentido, concluyeron que cada género establece sus propios criterios para paliar los efectos del calentamiento global.

Como corolario de este y otros estudios, hay que señalar el impacto que tiene descuidar al planeta. Se sabe que la quema de combustibles, la liberación de gases y la deforestación indiscriminada son las mayores causas del cambio climático.

Como se puede observar en los resultados, el incremento en las temperaturas provoca alteraciones en la vida y el hábitat de los seres vivos, que a su vez, genera un efecto en cadena, pues las modificaciones de plantas tienen su correlato en la vida de aquellos animales que se alimentan de ellas. Este es el momento de entender que los factores ambientales son decisivos para la supervivencia de todos los seres vivos, incluido el hombre.