Todos estamos enterados y al corriente de lo que Eduardo Inda le dijo repetidas veces al líder de Podemos, Pablo Iglesias. Y también que ha sido denunciado por falsas acusaciones y difamación al referirse al eurodiputado como colaborador del gobierno bolivariano que Nicolás Maduro impone en Venezuela. Pese a todo, aún tenía humor para hacer declaraciones cargadas de sátira en un programa de la Sexta. Y ahora, no se sabe si como provocación o en una especie de marketing arriesgado para darle un aumento en las ventas del periódico que dirigió desde 2002 a 2007 en su edición en Baleares, y donde a partir de 2011 regresó como reportero, ha publicado en su edición del jueves 31 un especial de 32 páginas en el que habla de Guinea Ecuatorial, poniendo al país del dictador Teodoro Obiang Nguema como un destino inmejorable para la inversión económica.

La antigua colonia española en África tiene infinidad de denuncias interpuestas por Amnistía Internacional por torturas, juicios fraudulentos, detenciones ilegales, malos tratos, homicidios y desapariciones de cientos de ciudadanos guineanos, y aplica la pena de muerte a los opositores políticos que intentan erradicar la dictadura del país. Aún así, el periódico no se lo ha pensado dos veces y ha colocado un publireportaje en sus páginas para darle publicidad y convencer a las empresas de que es un buen lugar para invertir. Según múltiples declaraciones de Obiang, el gobierno guineano tiene a España como su país predilecto y que desea lograr que empresas españolas se instalen en Guinea para generar ingresos y beneficios sociales para el pueblo, y no para tener rentabilidad económica para sus dirigentes.

Inda se ha referido en varias ocasiones a Pablo Iglesias como amigo del entorno de ETA, que elogia al grupo terrorista, que recibe financiación ilegal del régimen chavista de Maduro, y hasta llegó a decir que "a Pablo le gustaría amordazarme como hacen en el país que él admira". Curiosamente, Inda ha criticado muchas veces en sus editoriales el autoritarismo y la represión que practica Venezuela contra la oposición, los medios de comunicación y la población civil, así como la subida inflacionista de los precios alimentarios y con elevados índices de violencia, pero ahora alaba las bondades de Guinea, cuyo gobierno utiliza las mismas armas que Nicolás Maduro, y le hace un lavado de cara para intentar proporcionarle inversores.

¿Dónde está la ética de este periódico, que se ha pasado los últimos años denunciando a las dictaduras que siguen oprimiendo a su población por todo el mundo, y ahora acepta el dinero del gobierno de un dictador para promocionarlo? ¿Cómo puede acusar con tan graves palabras a un político que está en pleno auge y ahora hacer eso por lo que lo estaba acusando?