El hijo del escritor estadounidense Paul Auster, Daniel, murió a causa del abuso de sustancias ilegales. Daniel Auster tenía 44 años, sufría de adicciones y el 15 de abril pasado fue arrestado tras la muerte de su hija de diez meses. En estos momentos, estaba en libertad bajo fianza en su casa de Brooklyn a la espera del juicio.
La tragedia de la muerte de Ruby, la hija de Daniel Auster
Era el 1 de noviembre de 2021 cuando Daniel Auster estaba solo en casa con su hija de diez meses, Ruby. Por lo que trascendió de las primeras investigaciones, el hijo del escritor se acostó junto a la niña para hacer la siesta de la tarde.
Pero cuando despertó, Ruby estaba "morada y no respondía a los estímulos externos".
Al llegar al lugar, los servicios de emergencias del 911 encontraron inconsciente a Ruby, quien murió poco después de ser trasladada de urgencia al Hospital Metodista. La autopsia reveló que la niña murió por intoxicación y en su cuerpo se encontraron rastros de diversas sustancias ilegales, entre ellas fentanilo, un potente analgésico opioide.
No está claro cómo la pequeña pudo haber consumido las sustancias, pero los investigadores plantearon la hipótesis de que fue su padre quien se las dio para dormirla. La madre de la bebé, Zuzan Smith, dijo a la policía que dejó a su hija alerta y saludable antes de irse a trabajar.
Tras las pericias, Daniel Auster fue arrestado cinco meses después, bajo la acusación de “homicidio involuntario y homicidio por negligencia criminal”. La fianza que tuvo que pagar para esperar el juicio en casa fue de 250.000 dólares más la realización de un tratamiento psiquiátrico.
Abuso de sustancias ilegales y arrestos
Daniel Auster comenzó a consumir estupefacientes cuando era adolescente.
Había sido arrestado varias veces por posesión de sustancias ilegales y robo, por lo que fue sentenciado a cinco años de libertad condicional. También se había declarado culpable del robo de 3.000 dólares a un narcotraficante.
Una vida que también fue inspiración para su padre
Daniel nació del matrimonio entre el autor de la Trilogía de Nueva York y Lydia Davis, también escritora y traductora, quienes se encuentran divorciados.
Paul Auster y Davis no hicieron declaraciones desde que ocurrió la trágica muerte de su nieta y no mantenían relaciones con su hijo.
Sin embargo, había servido de inspiración a varios personajes de las novelas de su padre. También, había trabajado en la película Smoke, escrita por Auster, en la piel de un ladrón de Libros. Su complicada vida e historial policial también fueron recreados en escritos de la segunda esposa de Paul, la también escritora Siri Hustvedt.
El diario estadounidense The Yorker, que fue quien publicó la primicia, informa que la muerte de Daniel Auster se debió a la “sobredosis accidental” y que la policía encontró más sustancias en el domicilio de Daniel.
