La fiscalía de Bolzano ha abierto una investigación sobre las llamadas 'fiestas COVID', es decir, fiestas privadas que se están celebrando en el norte de Italia, más precisamente en la región del Tirol del Sur, Trentino Alto Adige. El objetivo de estas mal llamadas “fiestas”, tienen el objetivo de contagiarse de Coronavirus porque entre los “invitados” hay por lo menos un positivo en COVID-19.
La peligrosa costumbre se ha extendido en una zona del norte de Italia que tiene sus raíces en el grupo lingüístico alemán. En la provincia autónoma de Bolzano el 67% de la población habla alemán y está en línea con fiestas que también se realizan desde hace tiempo en Austria, Alemania y Países Bajos.
El objetivo de estas peligrosas 'fiestas COVID'
En Italia existe la obligatoriedad de obtener el certificado sanitario, o “green pass”, tanto para trabajar como para las actividades recreativas, y el certificado se consigue a través del plan de vacunación o de haber padecido COVID. Algunas personas ya se está manifestando por los elevados aumentos de contagios a través, justamente, de la población no vacunada. Por este motivo, la fiscalía de Bolzano abrió una investigación sobre estas fiestas llamadas también “corona party” que buscan contagiarse para desarrollar la enfermedad, conseguir la inmunización y el certificado sanitario.
Padres que involucran hasta a sus hijos en edad escolar
Las fiestas, organizadas en lugares cerrados, donde participan positivos de coronavirus, claramente sin medidas de distanciamiento social, llegan a involucrar a niños llevados por sus padres antivacunas.
Patrik Franzoni, vicecoordinador de la unidad de COVID de Bolzano, explica la preocupación: “En una de esas fiestas en locales cerrados, se pueden infectar fácilmente entre 5 y 10 personas si hay una persona positiva con la variante Delta”.
Y son fundamentalmente los más jóvenes que no tienen el "green pass" a causa de una arraigada posición antivacunas que buscan esta peligrosa manera de lograr la inmunización.
"Hay consecuencias a largo plazo e incluso los jóvenes pueden acabar en el hospital", manifiesta con preocupación Franzoni.
El gobierno italiano busca endurecer las restricciones
De hecho, a causa de estas fiestas, en este momento, han debido ingresar tres personas, dos de ellas en terapia intensiva. Por este motivo, las autoridades trentinas han solicitado al gobierno una reunión urgente para estudiar nuevas restricciones que afecten en especial a los no vacunados.
Por otra parte, el gobierno nacional, a cargo del Presidente del Consejo de Ministros, Mario Draghi, busca forzar a los antivacunas con un “super green pass”, es decir, endurecer las restricciones al punto de excluir socialmente a quienes no se vacunen, impidiendo todo ingreso a eventos, cines, teatros o restaurantes. Italia tiene en este momento el 87% de la población mayor de 12 años vacunada con al menos una dosis de la vacuna, pero se estima que hay unos siete millones de italianos que todavía no se han vacunado.