Finalmente, tras tantas idas y vueltas y atronadores rumores de divorcio, habló el príncipe Alberto de Mónaco sobre la larga ausencia de la princesa Charlene, quien ya hace siete meses que se encuentra en Sudáfrica. El príncipe Alberto reconoce que tendría que haber hablado y aclarado antes las cosas y que su deber era terminar de una buena vez con que se comentaba. Rumores que a decir verdad, se agazapan sobre la principesca pareja desde el mismo día del glamoroso matrimonio.

Alberto de Mónaco rompe su silencio

Finalmente, y contrario a su estilo, el príncipe decidió romper el silencio sobre el asunto de la ausencia de su esposa y habló con la revista People, afirmando bien contundente que "¡Charlene no se exilió en Sudáfrica!

No abandonó Mónaco por casualidad. Ella no se fue porque estaba enfadada conmigo o con cualquier otra persona…”.

Su Alteza Serenísima aclara que su esposa ha regresado a su país natal no solo para seguir de cerca sus iniciativas en defensa de la caza ilegal de rinocerontes, sino también para "tomarse un tiempo libre con su hermano y algunos amigos". Alberto lamenta la distancia con su mujer y sostiene que "se suponía que iba a ser solo una semana, una estancia de diez días como máximo, pero ella todavía está allí porque después de la infección han surgido muchas complicaciones médicas".

Su Alteza Serenísima se considera un blanco fácil de los rumores

De hecho, Charlene ha sufrido, según los comunicados de la Casa Real monegasca, tres intervenciones quirúrgicas y hace pocos días, al tiempo que Alberto anunciaba su pronto regreso al principado, la princesa tuvo que ser hospitalizada de urgencia en Durban a causa de un colapso.

El príncipe también habla de su reticencia a lidiar con los rumores: "me estoy centrando en el cuidado de los Niños y pensé que todos estos rumores desaparecerían por sí solos”. Alberto de Mónaco considera una pérdida de tiempo tratar de responder a todo, pero claramente “somos un blanco fácil, nos golpearon fácilmente. Esto le afecta a Charlene y obviamente me afecta a mi".

Charlene, imposibilitada para viajar en avión

Charlene de Mónaco permanece en Sudáfrica desde hace siete meses y padece una infección otorinolarínguea grave. Fue ella misma en una entrevista quien narró sus problemas y diagnóstico: "Me sometí a una operación para el levantamiento del seno maxilar, para realizar un injerto óseo para hacer implantes en la zona molar.

Después de la operación, se produjo una infección que involucró los oídos”. La princesa y ex nadadora olímpica debió quedarse en Sudáfrica porque su sistema auditivo no soporta la presión de la presurización de la cabina de un avión.

En estos meses, Alberto de Móncao viajó en dos ocasiones para visitar a su esposa y llevó a los niños, los príncipes mellizos Jacques, heredero al trono, y Gabriella. Viajes que Charlene no dejó de documentar con fotografías de apego y cariño familiar.